Dos partidos de sanción para Bellingham por su expulsión en Pamplona

El Comité de Disciplina de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha sancionado con dos partidos a Jude Bellingham tras la expulsión del futbolista inglés durante el partido entre Osasuna y el Real Madrid del pasado sábado. El organismo considera que las palabras del jugador madridista —”fuck you”, según el acta arbitral— suponen un menosprecio al árbitro del encuentro, Munuera Montero. De esta forma, Bellingham se perderá los encuentros ligueros frente al Girona (domingo, 16.15) y el Betis (2 de marzo, a las 16.15). El castigo no afecta a su participación en la ida de las semifinales de la Copa del Rey frente a la Real Sociedad (26 de febrero, a las 21.30).

Finalmente, Disciplina no ha tenido en cuenta las pruebas videográficas ni los informes presentados por el Madrid, que alegaba una posible equivocación del árbitro en la interpretación de las palabras del futbolista. “En el minuto 40 el jugador (5) Bellingham, Jude Victor William fue expulsado por el siguiente motivo: Por dirigirse a mí, estando a escasos metros, en los siguientes términos: ‘Fuck you’ [que te jodan]”. Sin embargo, tanto el británico como el entrenador blanco, Carlo Ancelotti, esgrimieron que el futbolista profirió “fuck off [algo así como “vete a la mierda]”.

La transcripción de las imágenes televisivas de Movistar+ precisaba que la frase concreta fue “I’m talking to you with respect [estoy hablándote con respeto], fuck off”. No obstante, el articulado de la federación (RFEF) exige en su artículo 27 del Código Disciplinario que prevalezca el acta “salvo error material manifiesto”. El Real Madrid alega, apoyándose en una explicación de Cristiano Ronaldo en 2018, que la expresión es de uso común en Inglaterra por parte de los futbolistas, “sin que ello conlleve sanción disciplinaria alguna por los árbitros al no ser una expresión ofensiva ni de menosprecio”.

La resolución del Comité precisa que las alegaciones del club madridista no permiten “apreciar un error material manifiesto en el caso que nos ocupa”. “Ni las imágenes aportadas, ni las pruebas periciales que se acompañan permiten llegar a la convicción inequívoca de que el jugador no pronunció la frase que le atribuye el Acta, sino otra distinta. En particular la prueba videográfica no permite apreciar el momento exacto en que el jugador pronuncia esta frase de modo completo, siendo imposible a juicio de este Comité apreciar la preposición que acompaña al verbo fuck”, indica.

Y completa: “Ante esta realidad, las pruebas periciales y el propio esfuerzo de interpretación que el Club realiza sobre las mismas para construir su versión de lo realmente dicho resulta sin duda muy respetable, pero insuficiente para destruir la presunción de veracidad del acta arbitral”.