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Djokovic cae en Roma entre molestias ante un Rune imparable

El serbio, que dejará de ser número uno del mundo el próximo lunes, se despide del Masters en el Foro Itálico y ya mira a Roland Garros

Novak Djokovic
Novak Djokovic durante el partido contra Holger Rune en el Masters de Roma, este miércoles.Fabrizio Corradetti/LaPresse (LAPRESSE)
Pablo Macías García

Entre dolores y bajo la lluvia, Novak Djokovic ha caído este miércoles ante Holger Rune en los cuartos de final del Masters de Roma (2-6, 6-4 y 2-6). El tenista serbio, aún número uno del mundo hasta el próximo lunes, fue de menos a más y de nuevo a menos en un partido que tuvo que ser suspendido por la lluvia cuando Nole rendía mejor que su rival. El danés se impuso sin piedad durante el primer y tercer set al seis veces campeón en el Foro Itálico, que ya mira a Roland Garros y para el que espera estar al máximo nivel, tras perderse el Masters de Madrid por su lesión en el codo.

Rune superó con relativa facilidad el primer juego del partido, en el que le rompió el saque a un aquejado Djokovic con molestias que le dificultaban llegar a algunas bolas. En el segundo set el serbio subió las revoluciones para ponerse al nivel del danés, pero no lo suficiente para superarlo con claridad. Rune, consciente de las molestias físicas de Nole, obligó a su rival a estirarse y forzar para llegar a algunos golpes.

Djokovic no mostró ni de lejos su mejor nivel, pero le plantó cara a Rune, esperando su momento. Mediado el segundo set, tras una parada del serbio con el fisioterapeuta, los acontecimientos se precipitaron en contra del danés. Una bola al límite sobre la línea, muy discutida por Rune con el juez, le dio el deuce a Djokovic, que dos puntos después le rompió el saque a su rival por primera vez en el partido. El serbio también se metió al público en el bolsillo, que por momentos coreaba su nombre: “¡Nooole, Nooole!”.

El danés notó la presión, su enfado se transmitió a su juego y empezó a cometer errores que antes no había tenido. Con el 5-2 a favor de Nole, Rune tuvo otro encontronazo con el juez durante el descanso entre juegos, mientras llamaba al fisioterapeuta a gritos, lo que obligó a alargar el descanso unos minutos. Tras la vuelta, el danés se llevó dos juegos seguidos y empezó a ganarse también al público, que ya no aplaudía a un solo lado. La lluvia, que asomaba tímida en el inicio del segundo set, empezó a caer con más fuerza y obligó a suspender el partido durante una hora. Con un 5-4 en el marcador, la manga podía caer del lado de cualquiera de los tenistas.

Tras la reanudación, Djokovic se llevó el juego que necesitaba para forzar el tercer y último set. El serbio se había enfriado durante el parón y lo notó. Rune se impuso desde el primer juego y arrolló al serbio, que se resistió, pero no pudo con la intensidad de su rival. Cuando Nole pudo llevarse su primer juego, el danés ya le sacaba una ventaja de cuatro, que terminó por imponerse al número uno y ya está en semifinales.

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