La seriedad del Valencia aplasta al Sporting
El equipo de Gattuso, mal estudiante en la Liga, se aplica en la Copa
La legión de Gattuso aplastó la débil resistencia del Sporting en El Molinón con un partido formal, contundente y responsable, y avanzó hasta los cuartos de final de la Copa. Atropellado fue el debut del nuevo técnico rojiblanco, Miguel Ángel Ramírez, que concedió espacios, favoreció las transiciones del Valencia y encajó una goleada.
El Valencia, un mal estudiante en la Liga, se aplica en la Copa. Aprovechando, primero, su condición de participante en la Supercopa para burlar las primeras eliminatorias, y, segundo, la endeblez de sus rivales en dieciseisavos y octavos de final, la tropa de Gattuso, que pasa frío en el torneo de la regularidad, pisa con brío en el del KO del que es el actual subcampeón.
Edinson Cavani se adueñó bien pronto de los focos en El Molinón. En el minuto 9 marró una ocasión clarísima para hacer gol. Mariño, precipitado, sacó en corto sobre Insúa, que estaba de espaldas; el balón golpeó en el pie del central y salió rebotado hacia el uruguayo, que lanzó fuera una jugada cómica. El Matador indemnizó luego a los del murciélago con un doblete antes del descanso.
Unos segundos después de su error, Cavani embocó tras una pared que Kluivert tiró con Toni Lato en la frontal del área en una acción serpenteante del holandés. Y antes de llegar al minuto 45 recortó con la derecha y definió, con clase, con la zurda. La contra la condujo en esta ocasión Samu Lino. Cavani, con siete goles, cinco en Liga y el doblete de Gijón, ahuyenta con goles las dudas sobre cuál sería su rendimiento tras el Mundial.
Entre los dos pullazos del Matador llegó el gol de Justin Kluivert. Recuperó el Valencia en la frontal de su área. La pelota le llegó al talentoso André Almeida, que levantó la cabeza y con un único pase limpió la presión del Sporting y dejó a Kluivert solo en un mano a mano con Diego Mariño tras una carrera veloz desde la medular. Detrás del holandés corría Guille Rosas, que se quedó sin resuello.
Gattuso había advertido en la previa que le tenía mucho respeto al partido y plantó un once lleno de titulares con los cambios tácticos que presentó en Arabia ante el Real Madrid: el 1-4-3-3 en fase ofensiva y el 1-4-4-2 en fase defensiva, con Almeida de Kluivert arriba y abajo, y Lino cerca de Cavani. El técnico canario Miguel Ángel Ramírez se estrenó con paliza en Gijón.
La segunda mitad comenzó con un disparate arbitral. Munuera Montero pitó el inicio del partido mientras el meta del Sporting Diego Mariño y Giovanni Zarfino, uno de sus centrocampistas, estaban abandonando el vestuario. Sacó el Valencia de centro y en ese momento alguien advirtió al colegiado de la inferioridad numérica. Munuera detuvo el juego y esperó a que ambos jugadores llegasen. El despiste del Sporting en el partido era tal que ninguno de los nueve futbolistas del campo reparó en que faltaban dos compañeros. La grada se lo tomó a pitorreo. Con el mismo desempeño que en la primera parte, el Valencia barrió la débil resistencia asturiana y redondeó la goleada.
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