Gabriel Jesus destroza al Sevilla

El Sevilla era una fortaleza con cimientos de hormigón armado, pero esa solidez que había identificado al equipo de Lopetegui se ha visto resquebrajada con la salida de Diego Carlos y Koundé este verano. En el primer partido sin su pareja de centrales habitual en los últimos tres años, el Sevilla sufrió un martirio en su visita este sábado al campo del Arsenal para disputar la Emirates Cup. El equipo de Arteta se ha hecho este verano con un auténtico cazagoles como Gabriel Jesus y el delantero brasileño fue suficiente para desnudar el planteamiento defensivo de los sevillistas y darse un festín en su estadio.

El encuentro comenzó con un sentido homenaje del Emirates a José Antonio Reyes, ex del Sevilla y el Arsenal, fallecido hace tres años. Lopetegui y Arteta intercambiaron camisetas con el nombre del jugador utrerano y al concluir el partido, Curro Reyes, padre del futbolista, entregó el premio a mejor jugador del encuentro a Gabriel Jesus entre aplausos de la afición gunner.

Lopetegui apostó por Rekik y el canterano de 20 años José Ángel Carmona en la pareja de centrales, pero su sociedad solo tardó ocho minutos en mostrar sus primeras grietas. En la primera internada al área de Saka, Rekik lo empujó por detrás y el liviano delantero inglés se fue al suelo: penalti. Saka tuvo que esperar a que el estadio rindiera su homenaje a Reyes en el minuto nueve (su dorsal en el Arsenal) con una ovación cerrada. Una vez que se apagaron los aplausos, el inglés dio comienzo a la fiesta gunner anotando el penalti. A partir de entonces, el Sevilla se descompuso como un azucarillo y en tan solo 10 minutos, el Arsenal cerró el partido con dos goles de Gabriel Jesus y otro de Saka. El 4-0 antes del minuto 20, con fallos groseros en defensa, hacía saltar todas las alarmas en la dirección deportiva del Sevilla. Antes del encuentro, el presidente Pepe Castro confirmó que el club busca reforzarse con un central y un lateral izquierdo. Después del destrozo que ha sufrido ante el Arsenal, esa tarea se vuelve imprescindible.

Gabriel Jesus, sediento goleador desterrado por Guardiola del Manchester City, no paró de asediar la meta de Bono hasta que consiguió su ansiado tercer tanto avanzada la segunda parte. El brasileño suma siete goles en cinco partidos esta pretemporada con el Arsenal, y su sociedad con Saka, Odegaard y Martinelli funciona como un reloj suizo. Con el Sevilla claudicado hace muchos minutos, Nketiah cerró la goleada con el sexto y definitivo tanto en el 88, el último clavo del ataúd de la nueva defensa del equipo español. Lopetegui y Monchi necesitan darle muchas vueltas a este mercado de fichajes en busca de recuperar la solidez que le había permitido aspirar a todo en los últimos años.

Joao Felix vuelve y convence

A la misma hora pero a cientos de kilómetros de Londres, en Oslo, el Atlético de Madrid y el Manchester United se veían las caras en un encuentro en el que el jugador más buscado no estaba sobre el campo. Cristiano Ronaldo, que ha protagonizado la actualidad de ambos equipos en las últimas semanas, no viajó a la capital noruega a la espera de estrenarse esta pretemporada el domingo, en el encuentro amistoso ante el Rayo en Old Trafford.

El encuentro fue dominado por los de Tan Hag, pero fue sentenciado por los de Simeone. El técnico neerlandés pretende que el United se acostumbre a tener la posesión y sea eficaz tanto en transición como en estático. Lo primero funcionó muy bien, con Rashford y Martial creando peligro a la espalda de la defensa rojiblanca. Pero en lo segundo, en el ataque posicional, le falta aún mucho trabajo a la hora de que Bruno Fernandes participe más en la elaboración y el equipo no se atasque ante defensas cerradas. El Atlético, que salió con el debutante Nahuel Molina, supo sentirse cómodo dejándole el balón a su rival y esperando a golpear con la velocidad de Correa, Cunha, o Marcos Llorente.

A la hora de juego, Simeone revolucionó el equipo con nueve cambios de una tacada. Entre ellos estaba Joao Felix, que no jugaba con el Atlético desde abril, cuando cayó lesionado en los isquiotibiales de su muslo izquierdo. El portugués decidió el encuentro en el minuto 86 con un derechazo desde la frontal que no pudo atrapar De Gea, el cual no había tenido mucho trabajo hasta el momento. El United se enredó en los últimos minutos y Fred terminó expulsado después de un amago de tangana en el 90.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.