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El Alavés desespera al Villarreal

El conjunto de Abelardo saca provecho a su conservador plan para incomodar y derrotar (1-2) al Villarreal, al que le falló el remate final

Los jugadores del Alavés celebran el primer gol ante el Villarreal.
Los jugadores del Alavés celebran el primer gol ante el Villarreal.D. C. (EFE)

En el fútbol es recurrente la sentencia de que el fin justifica los medios. El Alavés justificó la máxima maquiavélica en La Cerámica. El conjunto de Abelardo se dedicó en exclusiva a defenderse durante 94 minutos de juego y sacó provecho a una jugada a balón parado y un contragolpe letal. Para desespero del Villarreal, que no se sintió cómodo en ningún momento ante el ejercicio de resistencia del conjunto vitoriano, al que Abelardo ha dotado de orden, colmillo y la solidaridad de un ejército entregado a una causa común para alcanzar los resultados que le alejan del descenso.

El Villarreal no supo cómo derribar el muro vitoriano, que pudo resquebrajarse en la parte final con el arreón amarillo. En el primer acto tuvo juego y le faltó el remate que sí encontró en el último cuarto de hora de partido, con la entrada de Enes Ünal. El delantero turco lideró la ofensiva castellonense, que mereció un empate que minimizara el mal. El Alavés diseñó un plan para llevarse un punto y se marchó con tres.

Tras una parada inicial de Sergio Asenjo a tiro cercano de Guidetti, el Villarreal, como era de esperar, asumió la iniciativa y el control del juego, ausente Rodrigo, con Javi Fuego en el vértice inferior del rombo propuesto por Calleja. El Alavés asumió la superioridad técnica del conjunto local, protagonistas los castellonenses siempre a partir del esférico. Tan elaboradas eran los ataques amarillos como rápidas las transiciones vitorianas.

Carlos Bacca tuvo las dos primeras ocasiones para el Villarreal. El colombiano, asistido por Mario, remató de cabeza por encima del larguero de Pacheco; posteriormente reclamó un posible penalti de Rodrigo Ely, costándole al cafetero una amarilla por su vehemente protesta al árbitro. Junto a Bacca formó pareja ofensiva su compatriota Roger Martínez, sin ritmo el delantero llegado de China para sustituir a Bakambu. El Alavés se protegió en torno a Pacheco, quedando en residuales las apariciones al área de Asenjo, con Guidetti y Munir aislados.

Le funcionó el plan conservador al Pitu y en una acción episódica el Alavés se adelantó en el marcador tras peinar de cabeza Rodrigo Ely, en segunda jugada a la salida de un córner con el descanso asomándose.

Obligado por la desventaja, intensificó su dominio el Villarreal desde el arranque del segundo acto. Y la gran oportunidad llegó para el Alavés tras una internada de Pedraza, cuyo disparo final lo desvío el travesaño de Asenjo. Se lamentó de la ocasión perdida el extremo vitoriano, cedido por el Villarreal, que ya pretendió su regreso en el mercado de invierno. Envidó Calleja con la entrada de Enes Ünal y Cheryshev. Más clarividente fue Abelardo con la incorporación de Ibai Gómez. El exjugador del Athletic, al poco de entrar al terreno de juego, culminó una contra que le acercaba a la victoria final.

El Villarreal no se dio por vencido y acortó distancias con un gol de Bacca, a falta de un cuarto de hora. Acarició el empate con un remate a la cruceta de Enes Ünal y posteriormente un fallido cabezazo de Álvaro. El asedio amarillo no tuvo la recompensa del gol. Para alivio del Alavés de Abelardo, al que le justifican los resultados.

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