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España estrenará la nueva Liga de las Naciones contra Inglaterra y Croacia

La selección disputará la primera fase de la competición el próximo otoño y si queda primera en un grupo de tres se clasificará para la fase final con otros tres rivales en junio de 2019

Aleksander Ceferin, presidente de la Uefa, sujeta el nuevo trofeo de la Liga de las Naciones.
Aleksander Ceferin, presidente de la Uefa, sujeta el nuevo trofeo de la Liga de las Naciones.PIERRE ALBOUY (REUTERS)

España estrenará su participación en la nueva Liga de las Naciones de la UEFA contra Inglaterra y Croacia en la disputa de una plaza para jugar la final a cuatro en junio de 2019. Ese es el premio por quedar primero, también una plaza en una repesca final de cara a la venidera Eurocopa. Si queda tercera y última en ese complicado grupo perderá categoría y disputará a partir de otoño de 2020 la siguiente edición de esta nueva competición continental en la segunda categoría. La Liga de las Naciones es una competición que nace para minimizar el número de partidos amistosos entre selecciones y propiciar un calendario con partidos de carácter oficial y más nivelados que atraigan más ingresos por televisión y patrocinios. No sólo otorga un título al campeón sino que ofrece cuatro plazas de clasificación para la gran competición a la que precede, en este primer caso a la Eurocopa de 2020. Y lo hace en detrimento de las habituales repescas, que desaparecen.

Los partidos ante ingleses y croatas se celebrarán entre el 6 de septiembre y el 20 de noviembre de este año. "La condición de favorito se gana en el campo. Es una competición atractiva que afrontamos con ilusión", explica el seleccionador español Julen Lopetegui. El nuevo torneo reparte a los 55 combinados en cuatro ligas determinadas por coeficiente de ránking UEFA. Y dentro de esas cuatro ligas todos han quedado subdivididos en grupos de tres o cuatro equipos tras el sorteo celebrado en la localidad suiza de Lausana. El bombo ha deparado algún emparejamiento fratricida porque por ejemplo Serbia y Montenegro, que no hace tanto compitieron como un único país incluso tras la desmembración de Yugoslavia, jugarán entre sí integradas en la tercera división continental. Una categoría más arriba son Eslovaquia y República Checa las que se cruzan. El nuevo formato propicia una competición con enfrentamientos entre rivales parejos. "Se verán partidos muy bonitos", valora Lopetegui.

La competición se pone en marcha nada más terminar el próximo Mundial. En ese momento no se producirá, como era habitual hasta ahora, el inicio de las eliminatorias habituales para la siguiente Eurocopa sino que se empezarán a repartir plazas para esta competición con la nueva Liga de Naciones. El 6 de septiembre comenzará la primera de las seis jornadas de la fase de grupos, que se sustanciará en las tres fechas dobles reservadas para partidos de selecciones en septiembre, octubre y noviembre de 2018.

En la Liga A, en la que participa España, se clasificarán los cuatro campeones de grupo para una fase final que se celebrará entre el 5 y el 9 de junio de 2019 con dos semifinales a partido único y final. Ahí se decidirá el primer campeón de la Liga de Naciones, competición bianual que además reparte ascensos y descensos: los primeros de cada una de las subligas se aseguran un puesto en la categoría superior, los últimos caen a la inferior.

Pero la Liga de las Naciones repartirá además cuatro plazas en la próxima Eurocopa de 2020. Y de alguna manera viene a sustituir los play-off. La fase de clasificación tradicional se sorteará el próximo 2 de diciembre en Dublín y dividirá a los equipos en diez grupos con partidos que se disputarán entre marzo y noviembre de 2019. Los dos primeros lograrán el pase directo. Restarán entonces cuatro plazas y ahí es cuando se retomará la Liga de las Naciones porque los cuatro campeones de cada división disputarán entre ellos unas eliminatorias para completar el elenco de los participantes en la Eurocopa. Puede ocurrir que algunos de esos contendientes ya estén clasificados, así que en ese caso se correría turno. Este formato abre la posibilidad a que, por ejemplo, entre las 16 selecciones con peor ránking UEFA haya al menos una que va a disputar la próxima Eurocopa. Macedonia, Georgia o Azerbaiján parten entre las favoritas. 

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