Lo que espera a Alonso en las 500 Millas: voces en el casco y caos en la pista

Como un astronauta que da sus primeros pasos sin gravedad, Fernando ha tenido que aclimatarse en tiempo récord a un nuevo planeta tras 16 años corriendo en Fórmula 1. Compañero, rivales y expertos coinciden en que la aclimatación del asturiano a las 500 Millas de Indianápolis ha sido óptima, a la altura de lo que se esperaban de un bicampeón del mundo. Ya domina el coche y el óvalo, pero este domingo, el día de la carrera (18.99, #0 y ESPN player), se encontrará aún con situaciones para las que no ha podido prepararse, que solo se dan durante las tres horas que suele durar esta competición caótica.

En una lucha en constante tráfico y a velocidades medias que superan los 300 kilómetros por hora, el asturiano escuchará dentro de su casco voces casi ininterrumpidamente procedentes de tres personas. La más importante será la de Michael Andretti, propietario de su equipo en las 500 Millas, que tomará las decisiones finales con la ayuda de un equipo de cinco o seis ingenieros que estarán analizando todos los detalles de la carrera. Las otras dos voces corresponden a los llamados spotters (localizadores), el mismo término que se usa en aviación para los encargados de identificar la posición del enemigo, pero que en los óvalos tienen la función de cubrir los puntos ciegos de los espejos. “A veces la radio se vuelve muy concurrida”, advierte Gil de Ferran, entrenador del español en el equipo Andretti Autosport.

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“Todo el mundo ha querido darle un consejo a Alonso, pero cuando empiece la carrera se va a volver en su contra porque los 32 rivales querrán adelantarlo y pensar: ‘Yo a Fernando lo pasé", observa en el paddock el gerundense Oriol Servià, que sumará con la de hoy su carrera número 200 en la Indycar, sus novenas 500 Millas, partiendo desde la 12ª posición. Tras casi dos décadas en la Indycar el piloto de Rahal Letterman Lanigan bromea ahora con que los medios se refieran a él como “el otro español”, pero encaja y celebra la repercusión que ha tenido el fenómeno Alonso en la Indy. “Si el que estuviera aquí fuera Hamilton a Chilton también le dirían el otro británico”, añade.

“Tiene que pasar por la experiencia, las 500 Millas es probablemente la carrera más larga que haya disputado nunca”, advierte Takuma Sato, viejo conocido de Alonso en la Fórmula 1 y compañero de equipo en Indianápolis. “Siete pit stops, más que en la carrera más ajetreada en F-1. Él se maneja muy bien en tráfico, pero veremos el domingo si tiene que afrontar las situaciones que se dan después de la bandera amarilla, con mucho tráfico. Es uno de los grandes desafíos que tiene que afrontar, pero estoy seguro de que lo solucionará”, pronostica el japonés, cuyo mejor recuerdo con Alonso en F-1, dice entre risas, fue su adelantamiento en Montreal 2007. Sato cree que el ovetense es, probablemente, uno de los pilotos mejor preparado que ha venido a Indianápolis. “Y está trayendo muchos fans nuevos a las 500 Millas”.