Luis Enrique: “Frente al City hicimos los mejores 40 minutos de nuestra era”

Al Barcelona le falta ser regular, tener 90 minutos de fútbol y no solo media parte. Penalización que le costó el partido ante el Manchester City y que deberá corregir para medirse con el Sevilla de Sampaoli, que saca resultados por definición –sobre todo en el Sánchez Pizjuán, donde lo ha ganado todo menos la Supercopa- y que está tercero junto al Atlético a tres puntos del Madrid, líder en la tabla. “Están haciendo un inicio de temporada espectacular, generando buen fútbol y siendo fortísimos en su casa. Será un rival muy complicado”, se arrancó el técnico azulgrana Luis Enrique; “Franco Vázquez, Vitolo y Nasri por dentro, llegadas por bandas con peligro… Es un equipo muy bien trabajado y creo que podrían luchar por la Liga. Si lo han hecho hasta ahora es por méritos propios”.

Ya se batió el Barça con el Sevilla en el Pizjuán [Supercopa] y logró infligirle la única derrota de la temporada. “Es una referencia porque son los mismos jugadores y técnico y hay patrones que sirven. Pero no será determinante y vamos a intentar ser lo suficientemente intensos y completos para volver a superarles”, convino Luis Enrique, que elogió la capacidad de mutación de un conjunto que a cada curso se remoza por completo. “El Sevilla cambia cada año, compra y vende. Pero sigue en la línea de buenos resultados y en la Liga está mejorando. Por eso necesitaremos una gran versión”, expuso; “porque sabe cómo atacar, es intenso defendiendo, reduce los espacios, y los de arriba son de calidad”.

“Las críticas me preocupan cero”

El Barcelona, en cualquier caso, llega en un momento delicado, después de perder ante el City. “Pero los primeros 40 minutos fueron los mejores de nuestra era, de los tres años”, resolvió el entrenador azulgrana; “mejor que el 0-4 del Bernabéu, sí. Aunque al final el resultado reflejó otra cosa y nada que decir”. Y tiró de ironía: “Somos tan buenos que no sólo sabemos ganar sino que también sabemos perder porque siempre hemos reconocido el mérito del rival”. Un tono que repitió cuando le preguntaron sobre cómo digería las críticas. “Estado Nirvana óptimo. No me entero de ninguna crítica. Ya soy yo bastante crítico conmigo mismo. Las entiendo y me preocupa cero, la verdad”, zanjó. Aunque pidió que no se hicieran análisis absolutos: “Yo tendría mucha más tranquilidad a la hora de reflexionar. En nuestro primer año, vilipendiado el cuerpo técnico al máximo, fuimos los que más títulos conseguimos. Un poco más de prudencia no vendría mal para todos”.

Confiado Luis Enrique en que a cada curso al equipo le cuesta encontrar de inicio el mejor fútbol –por más que en el primero lograra siete triunfos consecutivos-, aplica la misma receta. “Esto es como el Tour, se trata de no perder todas las etapas para llegar al final en disposición real y clara de ganar los objetivos”. Aunque para eso necesitará la mejor versión de sus jugadores, como de un Busquets que no acaba de funcionar desde que comenzara el curso. “No hay que exagerar”, matizó el técnico; “lo veo bien y aporta mucho, no solo en lo futbolístico sino también en liderazgo. Los jugadores pasan por momentos mejores y peores. No hay que hacer autocrítica exagerada. Le elogio por su actitud y estoy muy contento con él”.

La lista para el encuentro fue la esperada, con las bajas de Piqué –que volverá tras el parón de selecciones-, Alba, Iniesta, Mathieu y Aleix Vidal, que sigue sin comparecer. Masip, por su parte, fue descartado y entraron en la convocatoria el central Marlon y el lateral derecho Nili, ambos del filial.