“España es irresistible”

El seleccionador turco Fatih Terim era un hombre afligido al término del encuentro con España. Resignado, lo primero que hizo fue reconocer la superioridad española. Parecía consciente de que su equipo había sido vapuleado por una selección que ya no era solo la que mejor jugaba, sino que ante los suyos, también se convirtió en la más goleadora del campeonato en un partido. "Quiero dar la enhorabuena a España, un equipo muy especial . No hay forma de resistir contra su juego si tú no haces un gol", admitía desconsolado el vehemente seleccionador turco. "Después del 1-0" nos desconectaron. La sensación de Terim fue la misma que tuvo Peter Cech, el meta checo, al término del primer partido: "Te meten atrás y no te dejan salir. Es difícil salir de tu propia área".

En una Eurocopa que vive en la zona Cesarini, emulando los goles en los minutos finales que marcaba el legendario goleador ítalo-argentino de la Juventus, España protagonizó la primera goleada del campeonato. El primer triunfo holgado sin el reloj como elemento estresante. Ninguna selección había logrado más de dos goles hasta el viernes. Fue La Roja, a la que le cojeaba el remate, la que superó esa barrera y alejó el encuentro de la incertidumbre final que se está imponiendo en el día a día del torneo. "Y eso que decían que no marcábamos goles", decía con cierto aire de queja Ávaro Morata en la zona mixta. "La cuestión es buscar siempre algo, aunque las cosas vayan bien", prosiguió el delantero de la Juventus, que aguarda a que el Real Madrid haga efectiva la recompra para después negociar su futuro. Él no parece verse en un equipo en el que la competencia con Benzema, Bale y Cristiano podría cortar su progresión. "He visto todos los partidos de las anteriores Eurocopas y es difícil explicar lo que siento al marcar. Contra la República Checa se me resistió, pero también delante estaba Peter Cech, uno de los mejores porteros del campeonato.Sabía que tarde o temprano el gol iba a llegar", sostiene Morata.

Si tras el primer partido ante la República Checa, España ya había sido la selección más autoritaria en el juego, aunque no concretase con goles, ante Turquía logró aunar las dos facetas. Hasta el momento, ninguna de las selecciones restantes ha mostrado ni ese sometimiento a sus rivales desde el balón ni esa contundencia con la que el viernes se deshizo de su rival. Con todo, el mensaje de prudencia que desde hace varios días emite Del Bosque también cala entre los jugadores. "Aquí hay jugadores veteranos que saben cómo son estos torneos. Si ven a alguien que pierde la concentración se lo harán ver", concluyó Morata.