Filipe Luis: “El Barça está protegido”

Los resoplidos de Diego Pablo Simeone como freno para no decir lo que se le pasaba por la cabeza retumbaban en la sala de prensa. Sobreexcitado, digiriendo la derrota ante un gran partido de su equipo y las decisiones que considera que les perjudicaron. El entrenador del Atlético mezcló devoción sincera hacia sus jugadores con la ironía y el resquemor. “Me siento orgulloso de los futbolistas que tengo, estoy contento de trabajar con un equipo que da la vida en cada partido, que ante cualquier situación de desigualdad se repone, o que ante la dificultad o árboles que le ponen en el camino salta y no se excusa”.

Las desigualdades a las que se refería el técnico tenían que ver con la expulsión de Torres y con la no expulsión de Suárez por dos patadas lanzadas a Juanfran que no impactaron en el lateral y por un puñetazo a Filipe Luis.

“No sé ni lo que pienso”, decía Simeone, mientras se removía nervioso en su silla. “Si el árbitro entendió lo que entendió es porque lo vio así. Igual que en la Liga, en Europa ya empezamos a molestar algunos”. La actuación del colegiado alemán Brych generó que los discursos del entrenador y de sus jugadores se centrarán más en el arbitraje que en el juego en sí. “Es similar al episodio de Arda con el Madrid la temporada pasada, aunque este es más frontal”, abundó el entrenador rojiblanco.

“Estamos vivos”

“Estamos vivos, ellos tuvieron la posibilidad de convertir algún gol más, que les generara más tranquilidad en el marcador. No lo lograron y eso genera la expectativa del partido de Madrid, viniendo ellos a nuestro estadio. Va a ser un lindo partido si nosotros y nuestra gente lo entendemos bien”. Aunque más centrado en el análisis del juego, El Cholo no paró de elogiar a sus muchachos: “Hasta la expulsión hicimos una primera parte muy buena, en la segunda ellos nos acorralaron en nuestra área, era difícil salir. Pero siento alegría de ser el entrenador del Atlético. Ojalá estos jugadores sigan viviendo y sintiendo esta camiseta como lo hacen”.

Si Simeone se contuvo algo —“no estoy diciendo todo lo que pienso”, dijo— sus jugadores lo hicieron menos: “Creo que el Barcelona está protegido. Cuando juegas contra él se nota que tiene mucha fuerza y se penaliza con mucho rigor cualquier acción. Esto hace mucho daño a la UEFA. La expulsión [de Fernando Torres] ha sido totalmente injusta a mi modo ver, y eso condiciona mucho en un campo como éste y ante un rival que abre y ensancha el campo como el Barcelona”, se lamentó Filipe Luis. “No sé qué hay que hacer para que sus jugadores sean expulsados como los nuestros. Estamos vivos y queremos estar en semifinales, aunque es difícil luchar contracorriente”, prosiguió el lateral brasileño.

El tuit de El Niño

“Me voy triste de haber dejado al equipo con diez, responsable de que el equipo no haya ganado. Puede ser tarjeta, puede que no. La primera te condiciona mucho, puede ser tarjeta, pero se puede evitar”, criticó Fernando Torres. “¿Determinó mi expulsión el resultado?”, se preguntaba Torres. “Eso nunca se puede saber. Por lo que significa el partido, no deberían haber sido. Yo he jugado partidos a este nivel, donde se ha llevado de otra manera. Hoy me toca a mí personalmente vivirlo, creo que es uno de mis peores días como futbolista, pero en el Calderón todo es posible”, concluyó el delantero, que luego escribió en las redes sociales: “Me siento responsable de la derrota, pero ahora más que nunca todos al Calderón a remontar #ForzaAtleti”.

El capitán Gabi se presentó sereno en la zona mixta, pero tampoco ocultaba su contrariedad. “Estamos con impotencia, el equipo ha hecho un gran partido sobre todo en la primera parte, ha salido a ganar desde el primer minuto y esa expulsión tan rigurosa te deja sin opciones de pelear el partido. Está claro que si dijéramos todo lo que pensamos, saldríamos más en los periódicos de lo que salimos. Entonces nos callamos, no ponemos excusas y el miércoles a ganar. Yo no me lo creía, han sido dos amarillas que más allá del criterio arbitral, son en el medio campo, sin ningún ánimo de hacer daño y sin ninguna peligrosidad”, concluyó el mediocentro.

Por hablar, habló hasta Miguel Ángel Gil, el máximo accionista del club: “El Barça no necesita esas ayudas y el esfuerzo de mi equipo no merece algo así. Rummenigge quiere en semifinales que estén los que él cree que mandan y lo va a conseguir”, dijo en referencia al desprecio que el presidente del Bayern hizo al Atlético y al PSV hace tres semanas.