Argentina se queda muda

“Es increíble lo que me cuesta hacer un gol con la selección”. Así de francas fueron las palabras de Lionel Messi tras el partido por los cuartos de final de la Copa América de Chile. La Albiceleste acaba de derrotar a Colombia en la tanda de penaltis y el 10 del Barcelona se lamentaba por una clara ocasión de gol que había desperdiciado. Máximo goleador de la historia del Barcelona (418 goles), mejor artillero en un año natural (91, en 2012), y segundo en la tabla de goleadores de la selección argentina (suma 49 y persigue a Batistuta, 54), La Pulga no podía entender su gafe con las porterías vestido de celeste y blanco. Sin embargo, el rosarino no es el único delantero argentino que tiene su olfato goleador para el diván cuando cruza el charco.

La selección argentina comenzó su camino rumbo a Rusia 2018 con derrota en el Monumental frente a Ecuador (0-2) y con un empate ante Paraguay (0-0). Un saldo de un punto y cero goles a favor. El otro conjunto que se quedó mudo en las porterías en las dos primeras jornadas de la eliminatoria sudamericana fue Bolivia, aunque la nómina de delanteros del equipo verde tiene menos galones que la del Tata Martino. Los nombres de Messi (ahora lesionado), Agüero (tampoco estuvo ante Paraguay), Tévez, Higuaín, Lavezzi y Di María, a priori, le ponen los pelos de punta a cualquier defensa. Ocurre, sin embargo, que mientras consiguen récords en sus clubes, con la Albiceleste se les tuerce la puntería.

“Argentina tiene muy buenos jugadores, probablemente los mejores en sus ligas, pero, en la selección todavía se sigue esperando mucho más de ellos”, opina Mario Alberto Kempes. “Pero”, añade El Matador, “no es solamente un problema de los delanteros, se espera más de todos los jugadores. Y eso es trabajo para el entrenador”.

Argentina tiene muy buenos jugadores, probablemente los mejores en sus ligas, pero, en la selección todavía se sigue esperando mucho más de ellos”, opina Mario Alberto Kempes

Messi cerró la temporada pasada con la camiseta del Barcelona con 58 goles; Agüero se coronó como el máximo artillero de la Premier League (26 goles); los tantos de Tévez (29) llevaron a la Juve a la final de la Champions y a ganar el Scudetto; e Higuaín firmó 27 dianas con el Nápoles. En la temporada 2014-2015 la eficacia goleadora de La Pulga con el Barça fue del 29,25%, el porcentaje del Kun con el City llegó hasta el 22,61%, mientras que el Pipita cerró sus estadísticas con un 20,69%. En cambio, con la Albiceleste Messi registró un 20% de acierto de gol en el Mundial de Brasil y un 5,88% en la Copa América de Chile. Los números de Higuaín fueron del 8,33% y del 50% y los de Agüero del 0% y del 30% respectivamente.

“No creo que sea por una cuestión de presión. Estos futbolistas están acostumbrados a jugar con mucha presión en sus clubes. Se pueden fallar goles por problemas de definición o también porque la pelota no les llega en buenas condiciones”, vuelve Kempes. “Quizás no es una cuestión de los jugadores individualmente sino del equipo en su conjunto”, remata el campeón del mundo con Argentina en el 78. “Destaco la actitud por encima del juego”, reconoció Martino a sus muchachos tras el empate en Asunción. “Hicimos las cosas para ganar, tuvimos ocasiones, pero no se convirtieron. Tuvimos muchas más ganas que ante Ecuador, pero no se pudo ganar”, analizó Di María.

En cualquier caso, en el comienzo de la clasificación para Rusia, Argentina no pudo contar con Messi, Agüero (sufrió un desgarro en el primer partido frente a Ecuador), ni con Higuaín (no fue convocado por decisión técnica). En noviembre la Albiceleste recibirá a Brasil en Buenos Aires y luego viajará a Colombia. Mientras Martino espera poder contar con La Pulga, los delanteros argentinos quieren recuperar su idilio con el gol. “Las cosas no están saliendo de la mejor manera, pero hay que mirar hacía adelante”, cerró Di María.