Parejas y un “sé fuerte” para Messi

08/10 Jueves de dobles parejas

La del Madrid y los Boston Celtics, que hoy han demostrado que salvo los nombres, todo lo demás ha cambiado radicalmente desde su primer encuentro, allá por 1988, y que con el paso del tiempo, se ha ido perdiendo casi todo lo que hizo de aquella visita un recuerdo para la historia. En estos diecisiete años la NBA ha dejado de ser de otro planeta, este tipo de partidos distan mucho de ser excepcionales, cualquier comparación de los actuales Celtics con aquel mítico quinteto liderado por Bird es un sacrilegio e incluso los jugadores del Madrid no mostraron mayor emoción que si hubiesen jugado contra el Fuenlabrada. Total, que como ocurrió con el Dream Team, el único, el auténtico, el genuino, fue el primero. Mientras muchas imágenes permanecen frescas de aquel, este de hoy, en cinco días no habrá nadie que lo recuerde.

La otra doble pareja es la de Blatter y Platini, suspendidos cautelarmente por 90 días por el Comité de Ética de la FIFA. Sí, yo he pensado lo mismo. ¿Tenía comité de ética la FIFA? Pues, ¡vaya fenómenos!

09/10 Viernes de justicia poco comprensiva

Vienen los medios cargaditos de una tercera doble pareja, la de Messi y su papá, que se sentarán próximamente en el banquillo. En el de un juzgado. En primera instancia la Fiscalía apuntó al padre y liberó al hijo, que hizo un "yo no sabía nada" de libro (tantos años en España le han tenido que servir para aprender las tácticas que se usan por aquí) apoyado en la lógica confianza que ha de tener cualquiera hacia su progenitor. Ayer, la Abogacía del Estado, o sea, Hacienda, les ha enmendado la plana y citado a los dos. Pena pedida para ambos: 22 meses y 15 días. Vamos, que a la cárcel, incluso declarándole culpable, no irá.

Como no podía ser de otra forma, un comunicado del Barcelona expresaba su "afecto" y "solidaridad" a Messi (me ha recordado el "sé fuerte" de Rajoy a Bárcenas) y de paso, su "extrañeza" por la diferencia entre Fiscalía y Hacienda, al tiempo que denunciaba un "cúmulo de decisiones externas, totalmente inadmisibles (supongo que no se refieren a perseguir posibles delitos) que hace tiempo que se iniciaron y son ajenas al ámbito estrictamente deportivo. Perjudican la buena marcha del club, su estabilidad y a los deportistas que forman parte". Además de resultar muy parecida a otras notas de otras gentes que después, una vez comprobados los hechos, se las tuvieron que comer palabra a palabra, me flipa lo de que son cosas ajenas al ámbito deportivo y perjudican la buena marcha del club. De verdad, qué poco comprensiva es a veces la Justicia y como se ponen por unos pocos millones supuestamente defraudados sin parar a pensar en los efectos en la buena marcha de un club. A ver si ahora va a ser más importante eso que pelear por una Champions...

Y otra cosa. Lo de los momentos, otro tema recurrente. Poner el acento en eso es desviar la atención de lo importante. Si el susodicho, en este caso Messi, tuviese lo papeles en regla, no habría ocurrido nada. O sea, que si quieren apuntar hacia los responsables principales, que no se equivoquen en la búsqueda.

10/10 Sábado de clasificados

España tiene ya un sitio en la Eurocopa del año que viene en Francia después de ganar ayer a Luxemburgo. La travesía no ha sido cómoda, sobre todos en sus inicios, condicionados por el batacazo del Mundial y las turbulencias de todo tipo que provocó. La consecución del pasaporte no ha variado una dinámica donde hay más incertidumbres que certezas. La confianza es algo que cuesta mucho ganar y muy poco perder. En el verano de 2014, vivimos de una tacada dos grandes fracasos de quizás nuestros equipos más fiables. Las selecciones de fútbol y baloncesto. Ambos habían ganado una barbaridad en los últimos años, pero al primer revolcón, llegaron las dudas, que no se suelen desvanecer en una fase de clasificación, sino que necesitan de una gran competición para superarlas. Lo lograron los de baloncesto hace poco menos de un mes y en junio próximo les toca a los futboleros. Solo con una gran actuación se terminará con esta mirada que se le ha quedado a buena parte de la afición consecuencia de que después de vivir una época gloriosa, crees que al primer traspié, nada volverá a ser lo mismo. Y entonces, cuando menos te lo esperas, van los altos del baloncesto y llevan la contraria a escépticos y enterradores prematuros.

11/10 Domingo de mañana intensiva

Motos, carrusel de baloncesto, F1 y la final del China Open de Tenis en Pekín. Ah, y lo de Garbiñe Muguruza, que está empezando a ser cosa seria. Ha sido una mañana de no parar, saltando de un sitio a otro para intentar no perderte nada. Al final, emoción, lo que se dice emoción, no ha sido tanta, pues desayunando ya conocíamos lo de Garbiñe, la victoria de Pedrosa y la cuesta arriba que se le ha puesto a Lorenzo desbancar del liderato a Rossi, que tiene muchos boletos para aumentar su leyenda.

En el carrusel de baloncesto recién estrenado, dos de los tres partidos estaban liquidados en el descanso y solo el UCAM Murcia-Unicaja deparó algo de incertidumbre. De la F1, pues más de lo mismo. Bueno, Alonso terminó undécimo y Sáinz iba muy bien hasta que le fallaron los frenos. ¿Quién ganó? Pues el de siempre, Hamilton, que tiene el título en el bolsillo del mono. ¡Sorpresón! Queda lo de Nadal frente a Djokovic, que cumplió también el guion. La histórica rivalidad entre ambos, que ha deparado momentos para los anales, vive un momento muy descafeinado. Lo dijo bien claro Nadal cuando se clasificó: "Djokovic no está en mi liga". No era intención de ir de corderito, sino constatación de algo evidente. La brecha que se ha abierto entre los dos es, en estos momentos, suficientemente amplia como para que un enfrentamiento entre ellos no tenga mucho misterio. Nadal lo ha peleado, pero casi todos los momentos importantes del partido los ha dominado Djokovic. Ahí suele radicar la diferencia entre los que se llevan los títulos y los demás. Nadal tuvo esa virtud y la ha perdido. Nole, en cambio, parece conocer todos los secretos de esos decisivos puntos. Mientras no cambien las cosas, los Djokovic-Nadal no volverán a ser lo que fueron.

Buena semana a todos.