El Sporting paga sus pecados de juventud
Un discreto Betis aprovecha dos errores gijoneses para ganar en El Molinón (1-2)
El Sporting tiene muchas virtudes, pero puede echarlo todo a perder por un par de lapsus en un partido muy estimable. Al Betis le falta mucho para aspirar a glorias pasadas, pero tiene las tablas de jugadores como Joaquín y Rubén Castro. Por eso los tres puntos volaron hacia Sevilla cuando el Sporting fue mejor y tuvo las oportunidades más claras. El público supo reconocerlo con una ovación que, a falta de otra recompensa, premiaba el fútbol y la entrega de los chavales.
Carlos Castro es hijo de minero, como David Villa. Y tiene el gol en los genes, como el Guaje. Al cuarto de hora de su debut como titular en Primera, Castro firmó un movimiento en el área para hacer el 1-0 que hubiese firmado el máximo goleador de la historia de la selección española. Ese gol, precedido de otra maniobra genial de Halilovic, hacía justicia con un comienzo de partido espectacular del Sporting, en el que acumuló un gol anulado por centímetros, al propio Castro, un penalti no pitado a Piccini y un paradón de Adán a Jony.
El Betis fue el único equipo capaz de ganar en El Molinón la pasada temporada, pero Pepe Mel ya se dio cuenta aquel día de que algo grande se estaba cociendo en Gijón. Abelardo y sus chavales acabaron acompañando al equipo sevillano a Primera, donde amenazan con seguir rompiendo todos los pronósticos. Está compitiendo de maravilla con la misma base, penalizado por la costumbre de sus dirigentes de no pagar lo que deben. Gracias a la amistad de Abelardo y Luis Enrique llegó Halilovic, un joven mediapunta que aporta un plus de calidad.
Sporting: Alberto; Lora, Luis Hernández, Jorge Meré (Pablo Pérez, m. 80), Isma López (Guerrero, m. 62); Sergio Álvarez, Nacho Cases; Jony (Juan Muñiz, m. 75), Halilovic, Álex Menéndez; y Carlos Castro. No utilizados: Dennis; Guitián, Mascarell y Carmona.
Betis: Adán; Piccini, Bruno, Westermann, Varela; N´Diaye; Joaquín (Jorge Molina, m. 77), Portillo, Dani Ceballos (Petros, m. 70), Cejudo (Xavi Torres, min. 86); y Rubén Castro. No utilizados: Dani Giménez; Molinero, Jordi Figueras y Van Wolfswinkel.
Goles: 1-0. M. 16. Carlos Castro. 1-1. M. 46. Joaquín. 1-2. M. 57. Rubén Castro.
Árbitro: Martínez Munuera. Amonestó a N´Diaye y Nacho Cases.
Unos 24.000 espectadores en El Molinón.
Ayer Abelardo dio libertad a Halilovic y el joven croata resultó indetectable para la defensa del Betis. Por ejemplo en el minuto 16, cuando desequilibró con un caño junto a la banda y conectó con Carlos Castro, que se marchó de los dos centrales con un movimiento de delantero caro y superó a Adán. Sin tanta brillantez como en ese primer cuarto de hora, el Sporting completó una buena primera parte, pero dejó vivo a su rival. En el vestuario, Pepe Mel movió ficha: juntó a Joaquín con Rubén Castro en el centro y pasó a Cejudo a la banda derecha. El resultado fue inmediato, aunque para ello mediara un error de Carlos Castro que dio lugar a la contra de Cejudo y al centro que Castro amortiguó de cabeza para la sentencia de Joaquín.
Con el 1-1, el Betis se creció y al Sporting le entraron las dudas. Un par de saques de esquina reanimaron El Molinón, pero en realidad fueron el principio del fin. Adán atrapó un balón alto y con casi todos los jugadores en su área lanzó en largo hacia Rubén Castro, emparejado con Isma López, un delantero reconvertido a lateral. Isma López dudó entre cerrar y despejar, dejando a Rubén Castro el camino libre hacia el área. En la frontal, el canario se la jugó con un violento remate que se coló tras golpear el larguero. Dos golpes tan duros dejaron sonado al Sporting, que solo recompuso la figura tirando de guerra. Arriesgó Abelardo y los últimos minutos fueron un sobresalto continuo: rozaron el empate Carlos Castro y Guerrero, pero también el Betis pudo sentenciar a la contra.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.