El vestuario español: “Es una medalla heroica. Es el oro de la fe”

Como marca el protocolo de la gloria, sonó el himno del campeón se disparó el confeti dorado, se alzó el trofeo, se desató la algarabía y florecieron las camisetas conmemorativas de la hazaña. Eran de color rojo pasión y en el dorso se podían leer el eslogan ‘Dueños de nuestro destino’. El lema presidió la celebración de una de las medallas más sufridas del baloncesto español; la 16ª medalla de la selección absoluta, el cuarto oro de su historia.

Tenía una plata y un bronce y esto es maravilloso. Es la que me faltaba" Sergio Rodríguez

“Se lo dedico a todos mis compañeros, que me buscan y me encuentran y que son generosos en el esfuerzo. Estoy muy feliz de estar jugando a un nivel tan alto en este punto de mi carrera y de haber hecho mi parte para lograr esta medalla. Cada oro tiene su mérito, pero este es especial por muchas circunstancias. Sabe a gloria. Estoy orgulloso de cómo hemos reaccionado durante el torneo para manejar la situación. Yo venía aquí a ganar y siempre juego para ganar. No sé si es inesperado, tampoco sé si éramos favoritos o no, pero hemos sido campeones que es lo que cuenta. Este título lo recordaré para el resto de mi vida. Espero jugar durante muchos años porque disfruto, pero la vida va pasando. Estoy ilusionado con mis cuartos Juegos y en Río iré a por mí tercera medalla olímpica”, resumió Pau Gasol con la misma contundencia con la que se alzó con el MVP del torneo.

El jugador de los Chicago Bulls encabezó también el quinteto ideal junto a Sergio Rodríguez, De Colo, Maciulis y Valanciunas. “Para triunfar en un deporte de equipo es fundamental tener un buen entrenador y Sergio [Scariolo] es muy, muy buen entrenador. Ha sabido conjuntar y sacar lo mejor de este grupo que no es fácil”, dijo Pau antes de acudir al control antidopaje. “Crecimos en confianza, dureza y concentración durante el torneo. Cada vez creímos más en nosotros y en Pau como líder. Hemos pasado momentos difíciles y los hemos sabido superar sin ansiedad, sin pánico y sin individualismo”, analizó el seleccionador, que miró de reojo a la cita olímpica. “Solo estar en los Juegos es muy complicado y ganar medalla todavía más pero es un reto fantástico y tenemos la ambición de conseguirla. Pero para eso quedan 11 meses; dadme un respiro”, pidió Scariolo.

 Felipe Reyes: “El Rey nos ha dicho que somos la leche”

“El Rey nos ha dicho que somos la leche, por no decir otra cosa”, reveló Felipe Reyes, reivindicativo en su alocución. Nadie confiaba en nosotros y no merecemos el trato recibido incluso antes del torneo. Este equipo ha dado motivos para creer en él”, sentenció. “Hemos sabido sufrir, permaneciendo unidos y reforzándonos como grupo. Hemos creído hasta el final y aquí está la recompensa. Es una medalla heroica. Es la medalla de la fe. Todas las medallas son difíciles, pero ganarla contra pronóstico y cuando nadie nos daba como favoritos, vale el doble”, añadió Sergio Llull, uno de los cuatro madridistas que, junto a Sergio Rodríguez, Rudy Fernández y el propio Felipe, ha completado la temporada perfecta conquistando los cinco títulos que ha disputado. Llull, como el resto de sus compañeros, rindió pleitesía al MVP y tótem del equipo. “Pau es nuestro líder, el que nos guía hasta el éxito. Nosotros le seguimos y es un orgullo y un honor haber compartido vestuario con él durante tantos veranos”, contó.

Pau es un ejemplo para los que nos dedicamos a esto" Víctor Claver

Poco pudo hacer Lituania ante una España hormigonada en la adversidad. “La final es el partido en el que menos hemos sufrido. Sabíamos lo que teníamos que hacer, hemos salido muy concentrados y con el parcial de inicio que logramos ellos se vinieron un poco abajo y hemos controlado el partido. Ha sido un campeonato durísimo, Francia partía como favorito, pero hemos ido ganando finales desde el partido contra Alemania y es para estar orgullosos. Apelamos a la heroica y demostramos que en los malos momentos nos crecemos”, reiteró Llull antes de que tomara la palabra el debutante, Niko Mirotic, al grito de “¡uno de uno!, ¡oro a la primera!”. “Nos lo merecemos por todo lo que hemos sufrido y se lo dedicamos a los que han creído como nosotros que esto era posible. Hay que dar las gracia a Pau por lo que ha hecho por nosotros y por España”, proclamó a los cuatro vientos.

La medalla que le faltaba al Chacho

Más serena era la felicidad de Sergio Rodríguez. “Tenía una plata y un bronce y esto es maravilloso. Es la que me faltaba. Fue una pena perderme los oros de 2009 y 2011, pero al final el trabajo de todos estos años ha tenido su recompensa. Cuando estás en esta dinámica ganadora hay que aprovechar porque luego pasan años que, por unas cosas u otras, no lo consigues y te acuerdas. Al acabar he pensado en el largo camino recorrido en este Eurobasket y en mi carrera. Quería conseguir esto que había soñado toda la vida. También he pensado en mi niña que nació tiene tres meses y llevo casi mes y medio sin verla. Lo bueno es que ha tenido recompensa y la llevo un oro”, explicó El Chacho que, mientras agarraba la medalla, rememoró las dificultades de la misión.

“Ha habido muy buen ambiente en toda la concentración, Sergio [Scariolo] ha hecho un gran trabajo y todos, incluso en los momentos duros, conservamos la calma porque sabíamos que éramos un buen equipo. Este oro se puede comparar con el del Mundial de 2006 por inesperado. Se habló mucho de las bajas y de cómo podían restarnos competitividad, pero hemos hecho una demostración muy grande”, remató el base canario. “Hemos vivido partidos igualados que se deciden en un rebote y, por momentos, hemos tenido suerte. Pero la suerte le llega a quién se la trabaja. Pau ha hecho un campeonato increíble a nivel de juego y de actitud de líder. Es un ejemplo para los que nos dedicamos a esto”, cerró Claver.