Gales toca el cielo, Holanda se derrumba

Un triunfo el domingo en Cardiff ante Israel dará el pase a la Eurocopa a País de Gales, que en el peor de los casos se guarda en la recámara la opción de acabar la fase de clasificación contra la débil Andorra también en su feudo. Nada parece que pueda impedir el regreso de los galeses a una gran competición futbolística tras su única experiencia en el Mundial de 1958 y lo harán de la mano de un imperial Gareth Bale, que volvió a ser decisivo, autor del sexto gol de los nueve que ha marcado su selección en siete partidos, el que valió para derrotar a Chipre en Nicosia y situarse a un paso de hacer historia. En una similar tesitura está Islandia, que venció a Holanda y provocó un terremoto en el debut de Danny Blind como seleccionador.

El equipo que prepara Chris Coleman fue superior aunque jugó a un ritmo bajo sobre un campo muy seco y desigual. A los 26 minutos marcó Edwards, pero el árbitro anuló el tanto sin que se supiese muy bien el motivo. Gales fue más cuanto más pudo correr, siempre con Bale en posiciones centradas, en ocasiones incluso demasiado atrasado para entrar en contacto con el balón. La posesión del balón fue de Chipre, pero así estaba cómoda la selección británica, que encontró la victoria después de una ocasión clara de Ramsey a diez minutos del final. Dos minutos después marcó Bale de cabeza ante la locura de los aficionados galeses que atestaban un fondo del estadio chipriota.

Islandia, por su parte, sorprendió a Holanda y si empata el próximo domingo en Reikiavik contra Kazajstán también estará en Francia. Sería el país menos poblado en alcanzar la fase final de un gran torneo futbolístico. 330.000 habitantes censados (son los que viven solo en la ciudad de Alicante). La apartada isla volcánica ha entrado en erupción balompédica de la mano de una generación que ya acarició la clasificación para el pasado Mundial.

Lesión de Robben

Blind se estrenó como seleccionador y vivió una sucesión de desgracias. Mediada la primera parte se lesionó Robben, cinco minutos después Martins Indi se fue expulsado al valorar de forma rigurosa el árbitro un encontronazo con Sigthorsson. Desde el banquillo el equipo técnico dirigido por Blind, que tenía a Van Basten y a Van Nistelrooy como auxiliares, decidió retirar a Huntelaar para blindarse con el central Bruma. Se le cayó el equipo y ahora afronta un partido decisivo el domingo en Turquía para salvar al menos la repesca.

Todo el once que alineó Islandia juega lejos de su país y al equipo le reviste un estilo que entronca con el fútbol británico de hace 20 años, con todo lo arcaico, pero también con todo lo hermoso. Y hay talento. Lo abandera Gylfi Sigurdsson, que embocó un penalti cometido sobre Bjarnason al poco de empezar la segunda parte y logró un gol histórico que hunde a los holandeses, dañado además por las apurada victoria de República Checa ante Kazajistán, pero al menos aliviados por un gol de Letonia en Turquía que le impide caer a la cuarta plaza.

En Bruselas la selección belga pasó un mal rato ante Bosnia, a la que tuvo que remontar un gol inicial de Dzeko. Pero empató pronto Fellaini, con uno de sus inevitables testarazos y De Bruyne anotó justo antes del descanso desde fuera del área. Hazard sentenció de penalti y Bélgica es segunda de su grupo tras Gales. Tercera es Israel, que goleó con comodidad a Andorra. Más sufrió Italia contra Malta, a la que sólo superó con un nada ortodoxo gol de Pellé con la cadera cuando el partido moría. Ahora lideran su grupo empatados con Croacia, que se ha complicado de cara a su visita dominical a Noruega, victoriosa en Bulgaria. Inconfundible a pesar de su cada vez más oronda figura, Robert Prosinecki lideró desde el banquillo el desaguisado que Azerbaiyán ocasionó a su Croacia natal, frenada en Bakú lastrada por sus problemas tanto en la creación como sobre todo en la definición

Se mostraron los croatas en algún destello de Modric, Rakitic o Pjaca, pero incluso sufrieron en alguna acometida del crecido cuadro azerí.