Emery ya no falla

Ha sido una semana complicada para Unai Emery. Duchado por sus jugadores después de clasificar al Sevilla para su segunda final consecutiva de la Liga Europa, la cuarta de su historia, el vasco se acordaba de su padre, Juan Emery Alza, fallecido el pasado fin de semana. “Era una persona y un deportista humilde”, recordaba un entrenador que ha igualado lo hecho por el hasta ahora mejor técnico de la historia del Sevilla, Juande Ramos. Al igual que Juande en 2007, el Sevilla jugará una nueva final de la Liga Europa siendo campeón de la competición. Los guiños del fútbol hacen que la final de Varsovia del próximo 27 de mayo será ante el Dnipro, un equipo que fue dirigido por el propio Juande Ramos entre 2010 y 2014.

El proceso de crecimiento de Emery como entrenador ha sido impresionante en el último año. El técnico se ha cargado, de un plumazo, el cartel que tenía en Valencia de ser un técnico que solía fallar en el día clave. Ahora afronta su segunda final con el Sevilla y el recorrido ha sido muy distinto al de la pasada temporada. El equipo andaluz se ha movido con una autoridad insultante en la competición, eliminando de forma sucesiva a Borussia, Villarreal, Zenit y Fiorentina con una solvencia a prueba de bomba y sin perder (siete triunfos y un empate en las eliminatorias). Nada que ver con el triunfo en la pasada edición de la Liga Europa, que ganó después de eliminar en los penaltis al Betis, remontando ante el Oporto o con un gol milagroso de Mbia en las semifinales ante el Valencia.

Emery ha puesto fin a su leyenda negra de técnico perdedor y su cotización está al alza

Emery, de esta forma, ha puesto fin a su leyenda negra de técnico perdedor. De esta forma, su cotización se encuentra al alza. Su nombre aparece ligado al Milan, pero el vasco anda entusiasmado con el Sevilla y la posibilidad de ganar en Varsovia y jugar la Liga de Campeones. “Qué hay más seguro que tener un contrato firmado con el Sevilla”, responde Emery, que ha vuelto a confeccionar un equipo campeón después de la marcha de jugadores como Rakitic, Fazio o Alberto Moreno, aumentando de forma espectacular el rendimiento de valores como Banega, Bacca, Aleix Vidal o Vitolo. Un Sevilla empujado por un Krychowiak que jugará en casa la final o donde Sergio Rico se hace portero bajo la tutela de su entrenador.

Qué hay más seguro que tener un contrato firmado con el Sevilla"

No ha sido fácil el camino del éxito para Emery en el Sevilla. Llegó en enero de 2013 para enderezar el rumbo de un equipo en serios problemas. Supo rectificar un estilo que no daba resultados y en los dos últimos años ha sido campeón aceptando auténticas revoluciones en sus plantillas. Son dos finales consecutivas en la mochila mientras tiene dos partidos para batir el registro de puntuación en la historia del Sevilla, que son los 71 puntos logrados por el equipo de Juande Ramos a la finalización de la temporada 2006-07. Ahora, en espera de recibir al Almería y visitar al Málaga, cosecha 70.

Con esta cuarta final de la Liga Europa, el Sevilla iguala a Barcelona y Bayer como los únicos equipos europeos que han logrado alcanzar esta cifra de finales europeas en el presente siglo (los dos últimos de Liga de Campeones). Obra en la que ha participado de forma importante este entrenador dedicado en cuerpo y alma a su trabajo, que apenas disfruta de Sevilla. Que diseña partidos en la pizarra y los gana en el campo, como con los dos goles anotados a la Fiorentina, producto de la estrategia que todos los días ensaya en la ciudad deportiva sevillista. El resultado, un equipo campeón cuando el planteamiento era un proyecto a tres años. Emery ya no falla. Ha aprendido a ganar.