Luis Enrique: “La semifinal es un objetivo pobre”

 “La perfección no existe”, avisó Luis Enrique cuando se le preguntó anoche si lo de la primera parte se parece tanto a lo que buscó desde que le contrató Zubizarreta que huele a su manual de cabecera: presión alta, defensa adelantada, control de partido a través del balón, transiciones rápidas o conservaciones largas, dependiendo de la conveniencia… Y dos a cero en el descanso. Y el asturiano, tozudo, que no, que todo es mejorable, por mucho que pareciera feliz, orgulloso y contento, metido en semifinales sin despeinarse. Van ocho en los últimos diez años, siete en las últimas ocho temporadas, algo que le recuerda que está “en un gran club”. Martino no lo consiguió.

“No me atrevo a decir que lo mejor esté por llegar, ojalá sea así. Estamos donde queríamos estar pero queda refrendarlo todo” dijo el entrenador. “Sería un objetivo pobre quedarnos con estar entre los cuatro mejores de Europa, de lo que se trata es de estar entre los dos mejores. Este no me sirve de nada porque ahora pienso en ganar los dos próximos partidos de champions y jugar la final, ese es objetivo”, añadió el asturiano consciente, en cualquier caso, que lo conseguido tiene mérito dado que sabe que este es “un año especial y diferente por los muchos cambios que han habido”.

“Me alegro de que haya pasado el Bayern” aseguró el técnico

Apareció Mascherano para celebrar la clasificación, que consideró “importante para el club, porque antes de comenzar la temporada se marcan unas pautas, y una de esas es estar en semifinales. Quizás parece fácil pero no lo es. Estamos a dos partidos de la final. Ojalá esos dos partidos estén de nuestro lado”, dijo el jefecito. “Es un dato espectacular, a la altura de este club. Se nos exige siempre estar ahí” alargó Iniesta. “No queremos quedarnos en semifinales y queremos estar en la final. Sabemos que todos los rivales son difíciles pero esperamos llegar a la final. Todos los rivales nos exigirán el 150 %, pero si hacemos las cosas bien tenemos oportunidades de estar en la final. Las sensaciones sin muy buenas” dijo el de Fuentealbilla, sustituido tras una primera parte inmensa. Lo justifico el técnico, al decir que pensaba en lo que le viene por delante, porque en su manera de entender la vida, y el fútbol, el futuro, el partido contra el Espanyol, empezaba anoche tras el 2-0, así que dosificó a sus futbolistas con la calma que le daba saberse clasificado y si primero quitó al manchego, poco después reemplazó a Busquets.

“La perfección no existe”, avisa el técnico asturiano, inconformista

“Era mejor pensar en lo que viene, con tranquilidad y gestionando los próximos partidos, sin poner en riesgo el que estábamos jugando, porque tenemos muchos objetivos que afrontar” aseguró. Bien lo sabe Ernesto Valverde, entrenador del Athletic, rival en la final de Copa, que presenció la exhibición azulgrana anoche desde el palco del Camp Nou, con cara de poker, la misma de Luis Enrique en la banda, durante el juego, cuando pareció disimular su satisfacción por lo que estaba viendo en el campo. “Nunca puedes relajarte del todo, por bien que hayamos jugado” dijo el de Gijón que no podía disimular su satisfacción en la sala de prensa, de la que no se fue sin celebrar el pase del Bayern de Guardiola a la semifinal, tras golear al Oporto de Lopetegi: “Ahora estoy contento de que haya pasado, porque me alegro de que le pasen cosas buenas a mis amigos. Pep vuelve a demostrar lo que es como entrenador y el Bayern como equipo. Vamos a ver el sorteo”, concluyó, como si quisiera disfrutar al menos por una noche de un premio que si lo piensa, le sabe a nada.