Barreda envida primero

Hubo un instante durante la primera etapa del Dakar, ese que ansía ganar Joan Barreda, que resultó definitivo para comprender el trabajo mental que ha realizado el piloto castellonense para abordar la conquista del Toureg. Teniendo la posibilidad de superar a Marc Coma, que había salido por delante, decidió terminar por detrás del de Avià. ¿Por qué? En un momento de reflexión visualizó lo que podía ocurrir en la etapa siguiente, la de ayer, que contaba con el tramo de especial más grande de todo el recorrido de la competición, de 518 kilómetros. "Será una de las etapas trampa", había anunciado antes de subirse a su Honda, de ahí que valorase que no abrir camino sería la mejor opción. Y dio resultado. Barreda se adjudicó la segunda etapa, la décimoprimera de su colección particular, con un tiempo de 5 horas, 46 minutos y 6 segundos, seguido de su compañero Paulo Gonçalves y otro portugués, Rubén Faria de KTM.

"Ha ido fenomenal, ha sido una etapa complicadísima, en la que hemos tenido varias situaciones comprometidas. Una en un punto de navegación y otra a unos 30 kilómetros del final con un neumático completamente descompuesto. Las hemos salvado bien, sin perder demasiado tiempo y eso es lo importante", analizó Barreda, que tras dos días de competición se sitúa al frente de la clasificación general, algo a lo que por el momento no le da demasiada importancia. "Hay que ser cauto, tenemos mucho Dakar por delante aun y hay que ir paso a paso", confió.

Quien tuvo peor suerte fue Marc Coma, que en los últimos kilómetros del final de la especial sufrió un pinchazo en la rueda trasera de su KTM y tuvo que completarlos a una velocidad no superior a 60 kilómetros por hora. Ese accidentado final condenó al tetracampeón en motos a la sexta posición de la general, con 12 minutos de diferencia respecto a Barreda.