El arsenal del Barça agota al Bayern

Navarro, por momentos asentado como base, Tomic, con su constante labor de suma y sigue, Oleson, con una serie de triples en momentos trascendentes, Doellman, siempre fiable en sus movimientos y en su tiro, y hasta Marcelinho, capaz de rehacerse de su discreta actuación con otro triple vital… El Barcelona precisó de su inagotable carrusel de estrellas para doblegar a un Bayern Munich capaz de darle réplica y de mantener sus opciones hasta el último instante.

El Palau disfrutó de un partido espléndido e incierto. Uno y otro equipo se libraron a una incesante aceleración en su juego, en una búsqueda que deparó constantes vaivenes en el marcador y bastantes alardes individuales. El Bayern aportó las fulgurantes apariciones de Djedovic. El escolta bosnio que de muy joven tuteló el club azulgrana y que ahora es la principal mano ejecutora del aguerrido Bayern que ha pertrechado Svetislav Pesic, el entrenador con el que el Barcelona consiguió el triplete y su primera Euroliga en 2003, fue una pesadilla para el equipo de Pascual.

Djedovic no estuvo solo, ni mucho menos. El gigantón estadounidense John Bryant, el alero alemán Lucca Staiger... No hubo jugador del Bayern que se cortara ni un pelo. Del ritmo y del convencimiento con el que se emplearon da fe el hecho de que fueron capaces de cazar el doble de rebotes ofensivos que el Barcelona. Navarro falló mucho de entrada pero cuando entró en ignición resultó demoledor. Sus ocho puntos seguidos en el segundo cuarto sacaron al Barcelona de su primer bache. Los minutos en los que actuó de base en el inicio del último cuarto —el checo Satoransky continúa de baja después de la alteración cardíaca que sufrió— volvieron a darle un acelerón a los blaugrana.

El Bayern, con triples de Staiger, Bryant, Djedovic, el que fuera, siempre se agarró al partido. Se rehizo incluso de su bache en ataque, cuando se quedó clavado durante casi cinco minutos y el marcador dio un vuelco que parecía definitivo (de un 54-59 a un 68-59). Y así acabó siendo pero no sin que el Barcelona sufriera para mantenerse por delante. Lo consiguió gracias a una sucesión de triples de Oleson, Marcelinho y Nachbar, indispensables para responder a los 11 que sumó el equipo alemán, que no cejó en su indesmayable réplica hasta que sonó la bocina final.