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Ganar a Chile y golear a Australia, las exigencias para lograr el pase

Al prevalecer la diferencia general de goles, España debe ahora vencer y lograr un resultado abultado en los duelos del 18 y el 23 para clasificarse para octavos en el caso de triple empate

Del Bosque, pensativo, durante el duelo ante Holanda.
Del Bosque, pensativo, durante el duelo ante Holanda.Jeff Gross (Getty)

¿Y ahora, qué? La afición española ha amanecido consternada por la goleada encajada anoche frente a Holanda (1-5), la segunda derrota más sonrojante de la historia de la selección tras la sufrida en el Mundial de 1950 contra Brasil (6-1), en Río de Janeiro. Desde 1963, cuando cayó por 2-6 ante Escocia en Madrid, el guardián de la portería no había tenido que recoger cinco ocasiones el balón de la red. El topetazo frente al equipo de Van Gaal ofrece ahora un escenario preocupante para España, que de forma precipitada, muy lejos aún de la final que tendrá lugar el próximo 13 de julio en Maracaná, deberá afrontar dos duelos trascendentales frente a Chile y Australia. Ganar o ganar. Las cuentas para depender de sí misma pasan ahora por vencer a Chile (miércoles 18) y golear a Australia (lunes 23), dado que en el caso de un triple empate prevalecería la media de goles general.

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Así es la dinámica de la Copa del Mundo, que no entiende de paréntesis ni contemporizaciones. Exige el máximo desde el inicio. No fue nada bueno el de España, zarandeada por Holanda y a la que encima no le acompañó el marcador del otro encuentro del grupo B, en el que no se produjo ningún sobresalto y Chile venció por 3-1 a Australia. De este modo, su casillero queda con tres puntos y un balance de +2 a su favor. España no solo quedó a cero, sino que además tiene la rémora de un -4. La oranje, su verdugo en el lluvioso escenario de Salvador de Bahía, cuenta lógicamente con un +4 en su expediente y encara en su próximo duelo a los socceros, a priori el contendiente más asequible del grupo.

Según el punto 5 del reglamento de la FIFA, el primer criterio de clasificación en el Mundial son los puntos y a continuación la diferencia general de goles. Esto no solo prohíbe a España un nuevo tropiezo, sino que además deberá explotar toda su artillería en el envite contra los australianos. Concluir en la primera plaza de grupo se antoja muy complicado, así que el objetivo más realista ahora es echar el lazo a la segunda plaza que otorga el pase a los octavos.

España no se encontraba en una situación tan comprometida des del Mundial de 1998, en Francia. Entonces, el equipo dirigido por Javier Clemente cayó en la fase de grupos. Arrancó con una derrota ante Nigeria (2-3) que le lastró en los dos siguientes duelos. No pudo después abrir la muralla de Uruguay (0-0) y rubricó una goleada amarga en el tercer compromiso, contra Bulgaria, a la que le endosó un 6-1 en Lens. No sirvió de nada. Accedieron a la siguiente fase Nigeria (6 puntos) y Paraguay (5). España (4) quedó fuera.

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