Un español de 16 años, positivo más joven

La Federación Internacional confirmó ayer que Paco Climent, tenista valenciano, se convirtió en septiembre de 2013 en el hombre más joven en dar positivo en la historia del tenis: cuando tenía 16 años, en la orina del español y de su compañero de entrenamientos, el ruso Philipp Aleksanyan, con el que competía en un torneo Futures, se detectó estanozolol, un esteroide anabolizante que favorece el desarrollo muscular. La pasada semana, a ambos se les sancionó con dos años sin competir. El caso de Climent ha provocado inquietud entre entrenadores, médicos y federativos, sorprendidos por la profundidad del sistema de la lucha antidopaje, que ya llega a torneos de adolescentes que miran de lejos el profesionalismo, y preocupados porque se puedan producir más casos por falta de información en un nivel en el que los padres actúan como médicos sin saber que un jarabe contra el catarro puede romper la normativa.

"Falta información, los niños y los padres no tienen ni idea y ahora los controles llegan hasta los torneos ITF", explicaron fuentes federativas que conocen cómo se lucha contra el dopaje. "Falta conocimiento", añadieron. "Es un caso claro de accidente", dijo otra voz autorizada. "Nos sorprende que ya bajen hasta ese nivel para investigar".

Los dos adolescentes plantearon la posibilidad de que el origen de la sustancia estuviera en una pastilla que consumieron en el vestuario de su club de Gandía (Valencia) o en unas vitaminas contaminadas. Ellos no pudieron aducir un embarazo. Eso es lo que argumentó la búlgara Karatancheva cuando dio positivo por nandrolona, en 2005 y con 15 años: un aborto, dijo, elevó sus niveles hasta que protagonizó el positivo más precoz de la historia del tenis.