El Atlético espera a Diego Costa

En menos de una hora, Diego Costa pasó del pesimismo al optimismo. Cuando ayer entraba a la clínica sobre las dos de la tarde, manifestó entre dientes: “No jugaré contra el Barça”. A la salida, una amplia sonrisa adornaba su rostro. Las pruebas determinaron que en la parte posterior del muslo derecho no había rotura. “Yo llego a todo, estoy mejor, tengo un poco de dolor, pero siempre soy optimista”, comentaba ya con otro semblante. Nada que ver con sus gestos al abandonar el césped del Camp Nou, que retrataban a un futbolista que sentía que podía haberse roto en el momento más inoportuno de su carrera: en medio de la pelea por la Liga, la Liga de Campeones y con el Mundial de Brasil de fondo. Al poco de llegar Costa, también pareció por la clínica Arda Turan. Las pruebas al volante turco diagnosticaron un repunte de la pubalgia que padece desde hace un par de temporadas, aunque también se espera que pueda estar listo el miércoles para recibir al Barça.

Que el pinchazo que sufrió Costa el martes no le produjera una rotura, sino que responda a una mera contractura, ha disparado el optimismo en el propio jugador y también en el club. “Contamos con él”, aseguraban ayer desde el Cerro del Espino. Al duelo al que no llegará Costa es al del sábado ante el Villarreal, de Liga (16.00).

Diego Costa, de 25 años, ha disputado esta temporada 44 partidos entre todas las competiciones, y un total de 3.690 minutos. En el Atlético consideran que, con tal volumen de encuentros y horas en sus piernas, lo que no era normal es que un futbolista que lo juega todo, que no para de pelear, chocar y correr no hubiera tenido ya algún percance similar.

La participación de Costa en la cita del miércoles es fundamental para el Atlético por el tipo de partido que puede darse, con el Barça obligado a salir a marcar un gol y las posibilidades que se le abren al conjunto de Simeone para utilizar su recurso preferido: el contragolpe.

En el tren que trajo de vuelta a la expedición rojiblanca desde Barcelona rezumaba en el ambiente lo que hubiera sido el partido con Costa en el campo, sobre todo después del gol a favor, y con los espacios que dejó el Barça cuando se fue a buscar el empate. “Diego es nuestro líder, le vamos a necesitar”, explica Godín, que firmó en el Camp Nou una actuación soberbia refrendada por un cruce al límite cuando Iniesta encaraba a Courtois en el primer tiempo.