Florentino hace un guiño a Xabi

Alonso es el elemento que permanece invariable en todas las fórmulas de Carlo Ancelotti. En cuatro años no ha cambiado la importancia deportiva del jugador dentro del Madrid, y mucho menos ahora, en tiempos de experimentación, como se vio el sábado en Almería. Lo que sí han cambiado son las perspectivas de Alonso sobre su futuro en la medida en que se transformó el plan de Florentino Pérez. Desde que el presidente escuchó al Bernabéu aclamando en masa al centrocampista, hace tres semanas frente al Sevilla, en una exhibición de aprecio popular de una unanimidad solo demostrada a Cristiano, algo se ha removido en su mente. De pronto, la renovación de Alonso, tantas veces postergada, cobró carácter urgente cuando todas las cartas están en poder del futbolista, que acaba contrato el próximo verano. Falta un mes para que pueda negociar con cualquier club y no hay en Europa otro volante más preclaro ni más barato. Los mensajes que se envían entre intermediarios e instituciones comienzan a inflarse de cifras millonarias que dan mucho que pensar al guipuzcoano. Ahora Pérez parece decidido a retenerle.

El Madrid, de acuerdo con fuentes del club, venía ofreciendo a Alonso desde hacía meses una renovación prorrogable anualmente de 3,5 millones de euros netos. La propuesta se deslizaba a través de terceros e implicaba una rebaja de la actual ficha del jugador, que asciende a 4,5 millones. Persuadido de que así le mostraban la salida, el futbolista repetía una fórmula de cortesía cada vez que le preguntaban por su futuro: “No es el momento de hablar de este tema”.

El club blanco le ofrece 6,5 millones netos por curso, pero el City sube a los 10

Alonso no movió ficha. La movió el Madrid, que le ha invitado a renovar por dos años más, hasta junio de 2016, por 6,5 millones de euros netos anuales. El vasco, que tenía un pie fuera, se está replanteando aceptar. En el Madrid aseguran que Pérez está tan empeñado en retenerle que es capaz de ofrecerle incluso tres años más a 6,5 millones netos cada uno.

El presidente tiene razones para elevar su oferta. Hoy Alonso cumple 32 años, es campeón del mundo y quedará libre, lo que supone que tiene la llave de un tesoro. El club que le firme se ahorraría el traspaso al Madrid, dinero que emplearía en parte para pagarle al propio jugador una prima consolidada en el salario. Además, las condiciones del mercado son propicias a Alonso porque escasean los mediocentros como él, capaces de defender y de hacer jugar al equipo. El Manchester City cree que es la pieza que le falta para tener el medio campo más potente de Europa y le ha ofrecido 10 millones netos por curso. El Chelsea, el PSG y el Juventus se han puesto a la cola, mandándole señales con agentes o directamente. Incluso el United está interesado, pues carece de un volante central con criterio.

Hay sin embargo dudas sobre su estado físico tras su lesión de pubis

Dicen en el entorno del futbolista que su mujer, que espera el tercer hijo, juzga positivamente permanecer en España, del mismo modo que recela de mudarse a Manchester. En el círculo presidencial madridista explican que hasta ahora Florentino Pérez no había dado importancia a la renovación por dos razones. Primero, porque era un fichaje de Jorge Valdano, cuya herencia pretende superar cuanto antes. Segundo, porque en el club circulan informes que plantean la posibilidad de que Alonso inicie un declive físico acelerado, desgastado como está tras haber jugado al máximo nivel desde los 18 años en una posición que exige gran fricción. El propio Ancelotti comenta a sus ayudantes que, a pesar de la consideración de indispensable que le reserva por sus cualidades técnicas y su inteligencia, tiene dudas sobre su estado físico, no le termina de ver a punto y no descarta que haya perdido con carácter permanente la capacidad de movimientos que tenía antes de operarse del pubis.

Es norma en el fútbol que los clubes ahorren gastos renovando a sus jugadores al menos un año antes del curso en que acaban contrato. Así eluden arriesgarse a lo que se ha expuesto ahora el Madrid: estar a merced de lo que disponga un jugador al que, económicamente, le conviene marcharse en junio de 2014. La demora, según fuentes del Madrid, fue auspiciada por el deseo de Florentino de rejuvenecer la plantilla. El mandatario creyó que Illarramendi ocuparía el lugar de Alonso. Pero esa posibilidad ya no parece irrevocable, como se ha visto los últimos meses. Alonso es capital.