Marc Gasol frustra una vez más a Francia
España, con una canasta decisiva de su líder, supera los alardes de Batum y Parker (84-85)
Ni en Madrid, ni en Montpellier, ni en los amistosos ni en los partidos decisivos como la final del Europeo de hace dos años o los cuartos de final de los Juegos Olímpicos en 2012. España continúa siendo una pesadilla para la mejor generación de jugadores del baloncesto francés. Parker, Batum, Diaw, toda la camarilla suspira por dar ese imprescindible paso adelante que se les demanda, lo cual pasa indefectiblemente por ganarle a España. Pero la revancha es misión imposible. Durante algunos minutos importantes, cerca del final, la tuvieron al alcance de la mano, en el amistoso disputado en Montpellier, tras haber caído tres días antes en Madrid (85-76) y a solo diez días del inicio del Eurobasket en Eslovenia. Pero tampoco pudo rematar Francia en esta ocasión. Sergio Rodríguez y Marc Gasol volvieron a darle la vuelta a la tortilla y a cerrar un partido que, entre Batum en la primera parte, y Parker en la segunda, habían puesto muy de cara a su equipo con un 78-71 en el marcador a poco más de tres minutos para la conclusión.
FRANCIA, 84 - ESPAÑA, 85
Francia: Parker (28), Batum (17), Gelabale (2), Diaw (8), Lauvergne (-) —cinco inicial—; De Colo (2), Heurtel (10), Kahudi (-), Pietrus (4), Ajinca (6) y Petro (6).
España: Calderón (11), Llull (10), Mumbrú (5), Aguilar (5), Gasol (26) —cinco inicial—; Rodríguez (7), Rubio (8), Fernández (7), San Emeterio (2), Claver (-), Gabriel (3) y Rey (2).
Árbitros: Lamonica (Ita), Radovic (Ser) y Latisevs (Ucr). Eliminaron por faltas a Víctor Claver.
Pabellón: Park&Suites Arena, Montpellier.
España jugó con algunas intermitencias y desplegó otra vez el extenso libro de jugadas y combinaciones tácticas que ha escrito Juan Antonio Orenga. Tan pronto Claver es titular como pasan a serlo Mumbrú o Aguilar; tan pronto aparece Calderón al timón como se escora hacia la posición de escolta e irrumpe Ricky, o también Sergio Rodríguez, que fue el que tuvo la última palabra contra los franceses con un acierto pleno.
En ese marasmo, España se las vio y se las deseó para frenar a un Tony Parker desatado en la segunda mitad. Parecía que por fin iba a redimir a su equipo en su larga sucesión de derrotas ante España. Y dos cuartos de lo mismo había conseguido Batum en la primera parte, en la que resultó imparable. Pero en la reanudación Mumbrú le cortó el ritmo al magnífico alero de los Blazers, mortificado también por las faltas. La defensa española también acertó en los últimos compases del partido y Parker acabó fallando todo lo que durante muchos minutos había acertado.
Las acciones de Sergio Rodríguez en el último tramo del encuentro resucitaron al cuadro español, que dio un estirón y devolvió con creces a Parker y compañía la sucesión de canastas que consiguieron cuando se adueñaron del ritmo del partido. Sergio se mostró tan descarado como acertado en el último cuarto y le dio un tono excelente al juego ofensivo. Marc Gasol, imparable todo el partido sin que Petro, Ajinça y mucho menos Lauvergne pudieran evitarlo, acabó pletórico, con 26 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias. Suya fue, además, la canasta final.
Orenga desplegó de nuevo su extenso libro de jugadas y combinaciones
Parker había logrado un triple que puso el 84-81 en el marcador. Sergio replicó, 84-83, a falta de 56 segundos para el final. La defensa española se cerró a la perfección sobre Ajinça cuando los franceses trataron de ponerle la bola bajo el aro español. Restaban unos pocos segundos más de una posesión. La aprovechó a la perfección España con un pase de Sergio a Marc Gasol, que anotó sobre el tiempo de posesión y estableció el 84-85. Quedaban tres segundos. Parker tuvo tiempo para intentar un triple sobre la bocina final. Lo falló. España volvió a ganar y a demostrar su ascendente sobre un rival que se sumía otra vez en la frustración.
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