Una tarta, una ‘pole’ y muchas caídas

Sopló las velas de una tarta por la mañana. Era el día de su 26 cumpleaños. Y quería regalarse una pole, la 27ª en MotoGP, en un circuito que siempre ha adorado, no en vano Jorge Lorenzo debutó en este mismo escenario con 15 años en el Mundial de Moto3 y en el trazado jerezano ha vencido en dos ocasiones en 250cc y otras dos en MotoGP. Quiere volverlo a hacer este domingo (14.00, Telecinco), y el primer paso era situarse bien en la parrilla. Después de dominar todas las sesiones del fin de semana –excepto la primera de este sábado, cuyo mejor tiempo se llevó Crutchlow–, Lorenzo sabía perfectamente cuál era su objetivo y cuál la estrategia perfecta: salir el primero, como ha hecho en todas las cortas sesiones de clasificación (de solo 15 minutos) disputadas hasta ahora, y buscar un giro rápido y sin errores tan pronto como fuera posible. Se colocó en primera posición inmediatamente. Y ya nadie puso en duda su liderazgo en esos 15 minutos que, en cambio, dieron para muchos errores y caídas. “No he hecho la vuelta perfecta, he cometido algunos errores”, confesó. Pero le valió. E incluso mejoró el registro en la primera vuelta de un segundo intento.

Mientras el mallorquín se dedicaba a buscar esa otra vuelta magnífica que le asegurara la pole este domingo en su segunda tanda, otros tres pilotos en busca de algún casco rojo (esos gráficos que indican que uno lleva el mejor tiempo de la parrilla) rodaban por los suelos. El primero fue Crutchlow, que ya se había caído también por la mañana, y que se dolía de la espalda cuando hizo un intento de mejorar sus cronos después de rebozarse por la tierra. Y después vinieron los accidentes repentinos de Pedrosa, que perdió la moto de delante, y Rossi, que destrozó su M1: no sufrieron ningún daño, aunque ni uno ni otro pudo ya buscar otra vuelta rápida. Esa se la había adjudicado Lorenzo tan pronto como se encendió la luz verde en el pit lane y el de Yamaha salió lanzado a por su regalo de cumpleaños: la segunda pole del año.

A sus rivales para este domingo los tendrá junto a él en la primera línea de la parrilla: Pedrosa, cuyo tiempo no fue superado por ninguno de lo que quedaba en pista cuando él se relamía las heridas; y Márquez, que ha ido recortando distancias con los primeros poco a poco y de manera progresiva durante todo el fin de semana hasta quedarse a menos de tres décimas de Lorenzo. Había advertido el líder provisional del campeonato que no le sería fácil en Jerez, donde nunca ha ganado, pero la mejoría es evidente –“Estoy confiado para la carrera; necesito concentración y calma para hacerlo bien delante de nuestros fans”, diría el de Honda–, de modo que nadie descarta que pueda engancharse a Lorenzo y Pedrosa, los que mejor ritmo tienen, en la carrera. Crutchlow, Rossi y Bautista ocuparán (por ese orden) la segunda fila.

Rabat logra la primera pole de su carrera

Ha pasado los últimos años a la sombra de Pol Espargaró, llamado a ganar el título de Moto2 este curso que ya no tiene que vérselas con el todopoderoso Marc Márquez. Pero Tito Rabat avanza silencioso, sin hacer ruido, como si lo suyo no fuera pelear el campeonato, como si estuviera de paso. Y mientras las porras y las apuestas se olvidan de su nombre, él, que ha heredado los consejos de su amigo Márquez, él que trata de hacerse a sí mismo consciente de que nunca ha sido el número uno de su equipo, el que dirige Sito Pons, va sumando. Rabat se dio un homenaje en Austin con una remontada épica y una segunda plaza merecida, el mejor resultado de su carrera hasta ahora. Y este sábado, de vuelta a Europa, en una sesión que dominó de cabo a rabo, logró la primera pole de su vida.

Lo hizo por delante del británico Redding, uno de los más rápidos del fin de semana y a quien sacó más de cuatro décimas, y del japonés Nakagami, que quedó a seis. Casi a siete décimas concluyó, en cuarta posición, Pol Espargaró, que ganó en Catar pero se cayó en Austin, y no se encuentra con su Kalex en Jerez; está más nervioso y malhumorado de lo que pide un título mundial, a la sombra ahora de su compañero de equipo. Se intercambiaron los papeles.

Rins, segunda pole

Empezó la práctica y a los pocos giros, cuando apenas se habían dado tres vueltas lanzadas, los Àlex del equipo de Alzamora se caen, casi al mismo tiempo, en diferentes zonas del circuito. El primero, Márquez, pierde la moto en plena curva y se marcha por la escapatoria; rodaba en quinto lugar y fue perdiendo posiciones: tardó bastante en volver al box y cuando salió a pista otra vez el debutante no pudo recuperar la estela de los primeros. Saldrá 22º el domingo.

El otro Àlex, Rins, es lanzado al suelo por su KTM a la salida de otro viraje, cuando abría gas y exploraba los límites de la pista. Rins, líder de la clasificación empatado a puntos con Salom (ambos con una victoria y un tercer puesto) era primero de la clasificación entonces, gracias a un excelente giro casi un segundo más rápido que el que situaba justo detrás de él en la tabla a Viñales. Lo había hecho con el neumático gastado, confesaría después. Lo que añade más valor a la gesta. Le hubiera bastado para llevarse la pole, pues nadie le plantó cara en su ausencia. Y el único capaz de mejorar aquella marca fue él mismo. Lo hizo en más de una décima (1m,46,6s). En el penúltimo intento. Suma su segunda pole este año, después de la de Austin, donde también ganó la carrera. Y Viñales, que saldrá segundo, no pudo más que reducir distancias. La primera línea la completará Salom, que terminó a seis décimas.