Pellegrini empieza a despedirse

En otras ocasiones, Manuel Pellegrini había sido contundente a la hora de zanjar cualquier información acerca de su futuro en el Málaga. Tras una semana donde en la ciudad andaluza hierven los rumores, el chileno se plantó ante los medios para, presuntamente, analizar el duelo ante el Granada (18.00 horas). Casi nada se habló del derbi regional. Sobre todo, de una palabra, proyecto, que brilla por su ausencia ahora en el Málaga. Llamó la atención, por supuesto, que Pellegrini no desmintiera la reunión de su agente, Jesús Martínez, con el director deportivo del Manchester City, Txiki Beguiristain, el pasado miércoles en Madrid. Y no fue la primera. En Oporto, con motivo del duelo de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, ya se mantuvo un primer contacto. “Hay muchas especulaciones. Existen reuniones en las que mi agente puede estar reunido por otros jugadores, pues no me lleva solo a mí”, aclaró el entrenador, con una sonrisa en la cara. En el club tienen la sensación de que el chileno ha comenzado a despedirse. Lo hace con elegancia, apelando siempre al enorme compromiso que la plantilla y el cuerpo técnico han demostrado a lo largo de la temporada.

Hace ya algunas semanas que Pellegrini le transmitió a la propiedad del Málaga la necesidad de que se forjara un proyecto serio, donde no cupiesen impagos, existiera una mínima inversión, no se produjeran más ventas que las de Isco y se cuidara la cantera. El chileno no ha recibido una respuesta global y comprometida a sus peticiones. Es más, Weligton, el capitán, desveló que el club le había pedido un nuevo plazo para ponerse al día en el pago de las nóminas. Los jugadores cobraron el jueves un salario que se les debía y se espera que antes del día 15 reciban el pago de la otra nómina que se les debe. No obstante, no deben existir más problemas con los jugadores, pues el club recibirá en breve los últimos pagos de la UEFA por su brillante papel en la Liga de Campeones. Más crudo lo tienen, por el momento, algunos proveedores, a los que el Málaga les sigue debiendo una cantidad importante.

Pellegrini, con contrato hasta 2015 y una cláusula de rescisión de cuatro millones de euros, todavía no ha comunicado a sus jugadores si se queda o no en el Málaga. Lo que sí le ha dicho es que no esperen a su decisión para escuchar ofertas. En definitiva, que no liguen su futuro al suyo. “Ningún jugador está esperando mi decisión. Cada futbolista es consciente de la situación interna y externa de la entidad”, aclaró. En la entidad, no obstante, son conscientes de que la ausencia del chileno debilitará el posible proyecto que los dirigentes del club, en busca por cierto de nuevos inversores, sean capaces de organizar en espera de la decisión del TAS sobre la prohibición de la UEFA de participar en competición europea la próxima temporada.

De esa ausencia de respuestas de la entidad habló también el chileno. “No es ideal acabar la temporada así, hablando de estos temas. Los clubes trabajan con mucha anticipación y este club debería estar trabajando. Nosotros solo tenemos una realidad por delante y es la de alcanzar puestos europeos aunque el futuro del Málaga sea incierto”, argumentó Pellegrini.

Quinto clasificado y con la Liga Europa prácticamente en el bolsillo, el Málaga, a cuatro puntos del cuarto clasificado, la Real Sociedad, llega al final de Liga muy desgastado después de una temporada bastante intensa. Afronta ahora el derbi regional ante el Granada y el miércoles un partido adelantado por la final de Copa frente al Madrid. A pesar de su decepción, Pellegrini, por profesionalidad y fidelidad a una afición incansable, no quiere tirar la toalla. “Queremos meter al equipo en Europa y luego ya veremos”, admitió. El hombre de las palabras justas y uno de los artífices principales de este gran Málaga.