Tercera agresión de David Navarro

David Navarro (Puerto de Sagunto, 1980) cerró su cuenta de Twitter hace un mes tras los insultos recibidos por los propios aficionados granota que le recordaban su pasado valencianista. El central del Levante vive marcado por su pasado. Su codazo del domingo a Cristiano Ronaldo, en el minuto 2, antes de la victoria del Madrid en el Ciutat de València (1-2), remite a otros episodios violentos anteriores: el puñetazo a Burdisso, central argentino del Inter, en un partido de Champions en Mestalla en 2007 (seis meses de sanción por parte de la UEFA); y un codazo a Llorente, el delantero del Athletic, en un encuentro de Liga de 2011 en San Mamés. “Perdí los papeles tratando de defender a un compañero y saqué el instinto protector”, dijo Navarro para explicar el ataque a Burdisso.

El codo derecho de Navarro impactó en la ceja izquierda de Cristiano cuando el central se elevaba para cabecear el balón. “No tenía intención de hacerle daño”, declaró el zaguero después de abrirle a Ronaldo una brecha de cinco puntos de sutura. El delantero, sustituido en el descanso por la pérdida de visión, viajó ayer a Lisboa para ser reconocido por los médicos de Portugal, que han desaconsejado su participación en el amistoso de mañana miércoles ante Gabón.

El Levante-Madrid fue una sucesión de malas artes. Hubo un manotazo de Ballesteros a Xabi Alonso y otro de Pepe a Martins antes de acabar con varias trifulcas en el túnel de vestuarios. Iborra, el mediocentro del Levante, lo contempló desde fuera. “Me quedé en el campo para recoger la camiseta de Iker Casillas y cuando llegué había un barullo”, confesó.

El Real Madrid califica de “ejemplar” el comportamiento del defensa portugués

Insultos, gritos y agresiones entre jugadores de ambos equipos e incluso entre un empleado de seguridad del Madrid, José María Higuero, y otro empleado del Levante, Vicente Herrero, según consta en el acta del árbitro, Muñiz Fernández.

Ballesteros declaró haber entrado en la enfermería para interesarse por la herida de Cristiano Ronaldo, pero, al llegar allí Pepe, los dos centrales se enzarzaron en una pelea. El Madrid culpa a Ballesteros de golpear a Pepe, cuyo comportamiento califica de “ejemplar”. “En mi vida he agredido a nadie y menos a Pepe”, replicó anoche Ballesteros. Sergio Ramos instó al capitán levantinista a dedicarse al boxeo y no al fútbol. Los granota acusan a Pepe de haberse mofado de ellos con sus “bailecitos”.

Las cuitas entre ambos equipos se remontan a la Copa del Rey de hace dos temporadas: el cuadro de Mou ganó 8-0 en el Bernabéu y los granota se sintieron burlados por los gestos de los madridistas. En la vuelta, Ballesteros agarró de la pechera a Mourinho en el túnel de vestuarios. La tensión subió en la Liga cuando el Levante venció en el curso pasado al Madrid en el Ciutat de València (1-0) tras la expulsión de Khedira después de una supuesta provocación de Ballesteros.

Tampoco es la primera vez que el Madrid de Mourinho se ve envuelto en una gresca de este tipo. Sucedió el año pasado frente al Villarreal. Tras insultar al árbitro (“¡Vaya atraco, hijo de puta!”), Pepe se encaró con varios rivales del equipo amarillo en las casetas de El Madrigal.