Brooklyn está de moda

Paradojas de la vida. Un multimillonario ruso, Mijail Projorov, lleva camino de cambiar el sustrato del deporte profesional en Nueva York y en la NBA. La refundación de los Nets tenía establecida una cita perfectamente orquestada con los ejecutivos de la Liga, unos linces para este tipo de asuntos. El acontecimiento debía haberse celebrado el jueves, madrugada del viernes en España: el primer partido de la temporada, entre los Nets y los Knicks. Un derbi con todas las de la ley, después de que Projorov trasladara la sede de los Nets de Nueva Jersey a Brooklyn, donde se acaba de inaugurar un pabellón para 18.200 espectadores que ha costado 770 millones de euros. El huracán Sandy, sin embargo, estropeó la fiesta y obligó a suspender el partido.

El Barclays Center, que así se llama el nuevo pabellón de los Nets, ha sido víctima en este caso, de su estupenda comunicación. En el extremo de Atlantic Avenue, una de las arterias de Brooklyn, el recinto cuenta con cuatro líneas de metro, dos de autobús y una de tren, que comunica con Wall Street en 10 minutos. Todas las líneas quedaron dañadas a consecuencia del huracán Sandy. El esperado encuentro tuvo que ser suspendido. La NBA reaccionó rápido: el derbi de Nueva York se jugará el próximo 26 de noviembre.

El desembarco de los Nets acaba con el gran vacío que dejaron en el barrio los Dodgers, el famoso equipo de béisbol que en 1957 emigró a Los Ángeles. Con aquel equipo, el 15 de abril de 1947, Jackie Robinson fue el primer negro que compitió en las grandes ligas. En 1960 fue demolido el estadio Ebbets Field, feudo de los Dodgers en Brooklyn. La zona se degradó. En los años setenta se convirtió en terreno abonado para la mafia, la droga y la prostitución. En los últimos tiempos, todo ha cambiado, para mejor.

El multimillonario ruso Projorov, de 47 años, es la 58ª mayor fortuna del mundo según la revista Forbes

Projorov, de 47 años, con la 58ª mayor fortuna del mundo según la revista Forbes, y el tercer candidato más votado en las últimas elecciones presidenciales de Rusia, ha formado el segundo equipo con una masa salarial más alta en la NBA: 65,7 millones de euros, solo superado por los 77 millones de los Lakers.

Los Nets van en serio. Si los Knicks cuentan con Stoudemire —que será operado de una lesión en la rodilla— y Carmelo Anthony, ellos han formado un quinteto con muy buena pinta: Deron Williams, Joe Johnson, Gerald Wallace, Kris Humphries y Brook Lopez. La gente ha respondido. El equipo lleva más de seis temporadas acumulando más derrotas que victorias, pero todo puede cambiar. Un eufórico Joe Johnson, figura recién llegada de Atlanta, se atreve a decir: “Podemos ganar el título. Así lo creemos”.

Es el equipo con la segunda masa salarial más alta en la NBA: 65,7 millones de euros, solo superado por los 77 millones de los Lakers

Los Nets han vendido 11.000 abonos. Un 37% de ellos son de aficionados de Brooklyn, pero un 23% son de residentes en Manhattan. Se interpreta que muchos están hartos de los desmanes de los Knicks; los últimos, la etapa de Mike D’Antoni como entrenador y la forma en que se desprendieron de su base, Jeremy Lin, adorado por la afición, por negarse a igualar la oferta de Houston: 19 millones de euros por tres años.

Si los Knicks tienen el Madison Square Garden y al director de cine Spike Lee, los Nets cuentan con el Barclays Center y el rapero Jay-Z, dueño de un pequeño paquete accionarial, el mismo que tras un concierto con los que inauguró el Barclays, tuvo que regresar a su domicilio en metro. Atlantic Avenue estaba colapsado.