Márquez, tercero, al asalto del Mundial

Llegó a Australia con el convencimiento de que este domingo debía firmar una carrera de campeonato, eso es, una carrera sin sobresaltos, sin riesgos, en la que no le importe ceder la victoria a cualquiera de sus rivales, en la que no pierda la compostura por arañar una mejor posición o firmar un adelantamiento imposible, marca de la casa. Marc Márquez contaba con que tendría dos comodines a lo largo de la temporada, así se lo advirtió su mentor, Emilio Alzamora, también director deportivo de su equipo. Y gastó el último hace una semana, en Sepang, donde se fue al suelo todavía no sabe muy bien por qué. La pista estaba empapada y perdió el control de su moto.

Así que este domingo, sin comodines ya, debe olvidarse de heroicidades y correr sin prisa, pero sin pausa. Le basta con sumar solo dos puntos para proclamarse campeón de Moto2 y sumar dos títulos mundiales, junto al de 125cc que logró hace dos años. Ese es su objetivo. Y partirá desde la primera línea de la parrilla, en el tercer puesto, para conseguirlo.

Estoy bastante contento. Pol va muy rápido, pero esa no es mi batalla Marc Márquez

Márquez no ha tenido un fin de semana tranquilo a lomos de su Suter. Se perdió la primera sesión de entrenamientos libres por un problema eléctrico que arruinó todo el entreno. Se había roto el conector que une el cableado principal al cable que da la corriente a las bobinas y tras tres salidas a pista frustradas su equipo no localizó el problema hasta que no desmontó la moto entera. Desde entonces ha ido a remolque. Se lo ha tomado con calma, sí, pero ha acusado aquel primer fallo y le ha costado encontrar la mejor puesta a punto para su moto, de modo que en ningún momento logró rodar tan rápido como Pol Espargaró, su único rival ya por el título. Si bien, aunque a seis décimas de aquel, Márquez está tranquilo. Y recuerda que no ha venido a Phillip Island a ganar la carrera, sino a ganar el campeonato. “Estoy bastante contento con el resultado. Pol va muy rápido, pero esa no es mi batalla. Este fin de semana voy paso a paso”, declaró al terminar la sesión de clasificación.

Espargaró, por su parte, agota cada bala que le queda, más después del mal sabor de boca tras la carrera de Sepang, donde no fue capaz de rentabilizar lo suficiente el fallo de su contrincante: solo le recortó cinco puntos en una mala carrera en mojado. Ha dominado prácticamente todos los entrenos del fin de semana en Australia y nadie ha podido acercarse a sus tiempos en la clasificación de este sábado. Quien más se ha aproximado ha sido Scott Redding, a medio segundo. Pero Espargaró, además, tiene el ritmo para ganar la prueba. Claro que ni eso será suficiente. Depende del error de Márquez.