Pedrosa, 18 milésimas de genio

La mejor noticia de la mañana en Misano, a parte de la desaparición de la lluvia y el calor del sol, llegó al poder comprobar que lo visto hace un par de semanas en la República Checa no fue un espejismo. Dani Pedrosa y Jorge Lorenzo no se conceden un respiro, su pelea por el título lo es también por cada pole, por cada victoria, y no dan tregua al resto de sus rivales, que aunque se acercan, nunca les alcanzan. Así ocurrió también en la sesión de clasificación de este sábado, en la que el catalán se llevó la pole position por un margen escaso de 18 milésimas de segundo. A esa distancia se quedó Lorenzo, que perdió la primera posición cuando el de Honda pasó como una exhalación por el trazado italiano y le arrebató el mejor tiempo gracias a un golpe de genio en el último parcial del circuito y cuando la bandera de cuadros ya ondeaba.

18 milésimas por una pole, 13 puntos (los que les separan en la general) por un título. Y dos pilotos en un estado de forma excepcional. Cuyas motos, además, responden a la par. Así lo demostraron dos colegas, dos de las revelaciones de la temporada: Crutchlow, con una Yamaha satélite, que fue tercero, y el debutante Bradl, con una Honda también privada, cuarto y a menos de cuatro milésimas de Pedrosa. Todos, además, se colocaron en los últimos compases del entreno a la cabeza de la clasificación en algún momento. Pero solo Casey Stoner ha podido este curso estar a la altura de Pedrosa y Lorenzo, exhibirse junto a ellos o contra ellos.

Ni siquiera en este fin de semana extraño, en el que apenas se han subido a la moto (no lo hicieron en todo el viernes, con un asfalto ni seco ni mojado por la lluvia intermitente), han acusado uno u otro el poco trabajo de puesta a punto en sus respectivas motos. Tuvieron suficiente con salir a la pista este sábado. Hubo que probar muchas cosas, neumáticos o suspensiones, por ejemplo, y depurar algunos detalles de la puesta a punto. Fue duro, apenas tuvieron un segundo de descanso, pero se acercaron a sus mejores cronos de un año atrás y, lo más importante, no se perdieron de vista uno a otro. Tampoco lo pretenden hacerlo este domingo en carrera: estarán uno al lado del otro en la parrilla y quién sabe si también en el podio. Las seis carreras que restan están en sus manos. El Mundial será de uno de los dos.