El Racing recurre a Manolo Saiz

A buen seguro, Luis García Berlanga se habría frotado las manos con el material para una de sus películas que proporciona el devenir institucional del Racing desde que aterrizase en Santander el empresario indio Ali Syed en enero del año pasado. La última secuencia de este guion, nada cómico ya, se grabó ayer en el salón de actos de una facultad cántabra donde el club celebraba la junta de accionistas de la que tenía que salir, sí o sí, un consejo de administración que garantizase la gobernabilidad de la institución. Y, sí, la nueva directiva surgió. Y, sí, el futuro del Racing, recién descendido, seguirá gobernado por Syed, que la última vez que pisó Santander fue en mayo de 2011.

El nuevo consejo, que afronta una deuda de casi 50 millones de euros, estará compuesto por ocho personas: el propio Syed; su primo Shahereyar Ali Baig Mirza; un hombre de su confianza del que hasta ayer no se tenía noticia, Husain Ahmed Mohammed Aldailmi, y Horst Webber, abogado alemán, uno de los dos representantes de Syed en la cita de ayer. La otra mitad de la directiva, la que más ha crispado a los pequeños accionistas, la que todo el mundo da por hecho que ha sido pactada con el expresidente Francisco Pernía, está compuesta por cuatro cántabros: los hosteleros Ángel Lavín y José Campos, el ex regatista olímpico Toño Gorostegui y el ex director ciclista Manolo Saiz.

A falta de que se oficialice, fuentes próximas a la nueva directiva aseguran que los dos puestos más importantes serán para Lavín, que ejercerá las funciones de consejero delegado, una vez que dan por hecho que Syed “ni va a volver a España, ni a Santander ni nada”, y para Saiz, que se encargará de la planificación deportiva, no tanto de la gestión como de la preparación de los jugadores. Saiz fue detenido en la Operación Puerto sobre dopaje en 2006 cuando era mánager del Liberty. El encargado de las relaciones públicas e institucionales será Campos, el marido de Carmen Martínez-Bordiú, que ya ejerció un cargo similar en su anterior etapa en el club. Entre sus aportaciones destacó la creación de la mascota del equipo, la vaca Tula.

El exdirector del Once se hará cargo de la preparación deportiva del equipo

El nombramiento del consejo era vital para el futuro del Racing, ya que sin él quedaría desgobernado una vez que los administradores judiciales firmen el convenio de acreedores y cesen su actividad a finales del próximo mes. Y, sin nadie que lo dirigiese, el club estaba abocado a la desaparición. De ahí, que los accionistas minoritarios, que habían consensuado una candidatura que aglutinaba a las peñas y al Gobierno regional para dirigir el club en caso de incomparecencia de Syed, no acabasen de dinamitar el acto, en el que se vivieron momentos de tensión.

Como era previsible, el empresario indio no acudió a la cita. Y, como también era previsible, volvió a estar representado, por lo que pudo ejercer el poder que le da ser el propietario de casi el 99% de las acciones. El abogado alemán Horst Webber y el español Fernando Escat, del bufete Baker & McKenzie, con sede en Madrid, fueron los encargados de asumir la papeleta en esta ocasión. En cuanto algunos asistentes se percataron de la presencia de Webber, que ya representó a Syed en la catastrófica junta de diciembre, se enzarzaron con ellos y trataron de impedirles la entrada al edificio. Solo pudo acceder escoltados por la policía. Para abandonarlo, además de con los agentes, contó con la ayuda del presidente de las peñas, Bernardo Colsa, que trató de apaciguar los ánimos y que unos minutos antes, desde la tribuna de oradores, les había advertido: “Tienen la propiedad, pero no a los clientes”.

La próxima toma de esta película se rodará en torno a octubre, ya que está pendiente que se resuelva el contencioso judicial que mantiene Jacobo Montalvo, antiguo propietario, con Syed por el pago pendiente de la mayor parte de las acciones. Una resolución que pondrá fin o seguirá permitiendo el mandato a distancia del empresario indio.