Un visitante demasiado tímido

Nunca se sabe si el estado nervioso que se respira en el Real Madrid, tras la enésima polémica arbitral, favorece o perjudica al rival que le visita. Lo que sí está claro es que la Real Sociedad es un equipo cómodo como visitante, un invitado muy educado que rara vez le estropea la fiesta al anfitrión. En lo que va de temporada, el equipo de Montanier solo ha conseguido tres victorias y dos empates a domicilio, todos ello en la primera vuelta. Betis, Sporting y valencia fueron sus víctimas a domicilio mientras el Racing y el Villarreal firmaron tablas. En las nueve jornadas de la segunda vuelta, la Real no ha puntuado en terreno contrario, una cuestión que explica su delicada situación clasificatoria y que le ha impedido despegar, habida cuenta de que Anoeta tampoco es un fortín blanquiazul.

Mestalla parecía marcar un punto de inflexión, cuando venció la Real por 0-1, el 15 de enero pasado. Un rival de postín y un terreno difícil de conquistar anunciaban una reacción que sin embargo no se produjo. Desde entonces no ha vuelto a ganar en sus desplazamientos la Real, y además ha perdido músculo en su campo. De ahí sus problemas.

Sin embargo, la cita del Bernabéu llega tan envuelta en la polémica arbitral que hasta el moderado Montanier se ha visto obligado a poner sus argumentos sobre la mesa. El técnico francés es poco dado a comentar las actuaciones arbitrales. De hecho tiende incluso a echar agua y no gasolina al fuego. Pero en el remolino de la Liga, manifestó su preocupación por los arbitrajes sufridos por la Real, sin hablar de las quejas del Real Madrid: “El gol de San Mamés, la falta a Xabi Prieto en ese partido, el penalti contra el Levante, o la roja a Illarramendi frente al Granada” fueron algunos de los agravios que enumeró el técnico francés. En su mente figura llegar a los momentos finales del partido de Chamartín con opciones de lograr algo positivo. “Si vas perdiendo 4-0, no hay nada que hacer, pero si tienes una diferencia de un gol siempre hay opciones de empatar o ganar el encuentro”, afirmó, antes de considerar que el objetivo de puntuar frente al Real Madrid: “es difícil, pero no imposible”.