La autocrítica didáctica de Bielsa

No es muy habitual en el fútbol profesional escuchar en una sala de prensa un ejercicio de autocrítica como el que hizo Marcelo Bielsa tras perder ante el Atlético. Un análisis cristalino en el que el entrenador argentino se puso él mismo en la diana. Disparó a su propia pizarra con esa calma dialéctica que le caracteriza: “Esta es una de las derrotas de mi carrera en las que más culpable me siento”. Frente a muchos entrenadores que no validan a la prensa como un interlocutor capacitado para explicar sus decisiones tácticas, Bielsa elaboró una argumentación didáctica de sus propios errores ante los periodistas. “Me siento especialmente responsable de la derrota porque las decisiones que fui tomando no modificaron ni resolvieron lo que pretendía corregir, debilitaron lo que el equipo tenía sólido. En el primer tiempo creo que el equipo defendió bien y la pelota llegó bien arriba, pero no generamos ocasiones. Con las correcciones el equipo no mejoró ofensivamente y empeoró la defensa. En los últimos 15 minutos conseguimos llegar, pero ya el partido estaba demasiado encaminado”.

Le preguntaron a Bielsa por qué en el segundo tiempo decidió colocar a Javi Martínez de lateral derecho. Respondió con naturalidad y convencido de lo que hacía en ese momento: “Iraola, que es nuestro lateral derecho, no estaba. De Marcos es nuestro jugador con mayores rupturas y llegadas al área rival. Entendí que de los zagueros que teníamos en el campo el más parecido a un lateral era Javi Martínez. Él tiene experiencia como volante por la derecha y tiene más ida y vuelta que el resto. Es una experiencia que repetiría”.

Lo de Perea tiene un párrafo aparte. Los vestuarios crecen con jugadores como Perea. Simeone

Las consecuencias de esos cambios fueron nefastas para Bielsa: “Perdimos la elaboración y no ganamos en profundidad. El segundo cambio, Muniain como volante ofensivo, fue porque creí que nuestro equipo organizaría mejor los ataques desde una posición más adelantada. Su incidencia solo se vio en los últimos 15 minutos”.

Al contrario que Bielsa, Simeone no tuvo que lamentarse de los cambios. Es más, su lectura hizo hincapié en el decisivo papel que ejerció Perea cuando entró. El defensa colombiano salvó un gol bajo los palos e hizo un par de cruces fundamentales: “Lo de Perea tiene un párrafo aparte. Los vestuarios crecen con jugadores como Perea. Lo tuvimos que usar y fue determinante en el partido. La manera en la que entró en el campo es para que la miren todos los que están en el banquillo y esperan una oportunidad”. “Uno es pasional y lo de Perea fue emocionante. Cada vez que entra da la vida, es el ejemplo a seguir”, insistió Simeone.