Una 'pantera' suelta en el Bernabéu

Hace dos años, el Olympique de Lyon pagó 13 de millones de euros a su eterno rival, el Saint-Etienne, para arrebatarle a la perla de su delantera. Bafétimbi Gomis (La Seyne-sur-Mer, Francia; 1985) aceptó el reto de suplir a Karim Benzema, ídolo de la afición que acababa de poner rumbo al Madrid, pero hasta su tercer curso no ha empezado a castigar las redes rivales con la frecuencia deseada. Sus siete dianas en 10 partidos de la Ligue 1 -está a tres de igualar su marca absoluta en cada una de sus campañas a orillas del Ródano- le han convertido al fin en un fijo en el once de Rémi Garde y le han permitido volver a las convocatorias de la selección francesa tras dos años de ausencia. En su momento más dulce, La Pantera, como le apodaron en el Saint-Etienne por su imitación del felino en sus celebraciones de los goles, pondrá hoy a prueba en el Bernabéu a la zaga del Madrid, aún imbatida en esta Champions (20.45; GolT).

A sus 26 años, Gomis es todo un veterano de la Liga francesa, en cuya Segunda División debutó con el Saint-Etienne en 2003. "Impresionaba por su físico", recuerda el exfutbolista español del Mónaco Gerard López, que se cruzó con él ya en la Ligue 1; "recuerdo verle en el túnel de vestuarios, era el típico jugador fortísimo, fibrado. Al mirar las alineaciones me sorprendió ver lo joven que era". "Es grande y poderoso, juega bien de espaldas y tiene llegada", explica el también español Francisco Pavón, que en el curso pasado se midió a Gomis con el Arles; "la calidad individual y el uno contra uno no son sus fuertes, pero se complica poco con el balón, lo suelta rápido y busca opciones de remate, que es donde hace daño". "Es muy trabajador y finaliza bien. No necesita muchas ocasiones para marcar", añade Yohan Mollo, extremo del Granada que el curso pasado se desempeñó en el Caen. "Que el Madrid tenga cuidado", remata a modo de advertencia Adil Rami, central del Valencia y compañero de Gomis en la selección gala.

La Pantera ya sabe lo que es marcarle a Casillas. Lo hizo en febrero pasado, en la ida de los octavos de la Champions. En las otras dos ocasiones que se ha batido con el Madrid, sin embargo, ha tenido menos suerte de cara a portería. Pero este año Gomis está más fino que nunca. Ayer, en la sala de prensa del Bernabéu, reveló que el aterrizaje de Rémi Garde en el banquillo lionés le ha beneficiado, aunque opinó que su momento aún no ha llegado. "Es verdad que el año pasado mi papel era el de comodín", aseguró; "pero lo mejor está por venir. Soy joven y tengo mucho margen para mejorar". "Llegó tras marcar muchos goles con el Saint-Etienne. En el Lyon encontró más competencia y ha tenido que adaptarse", dijo a su vez de él Garde; "está en un buen momento porque ha trabajado para conseguirlo, pero puede mejorar y quiere hacerlo".

"Este año ha ganado sobre todo en confianza", interviene el valencianista Rami; "antes se atrevía menos, ahora busca más la portería". El zaguero apunta otro factor importante en su mejoría, su asociación con el brasileño Bastos, asistente en tres de sus siete goles ligueros: "Su visión de juego y sus pases rápidos le benefician mucho". Ir con la selección francesa es otra de las claves. "Ha ido creciendo poco a poco a base de goles y si Blanc [el seleccionador galo] le ha llamado es por algo", opina Mollo. "En Francia se está hablando mucho de él", remata Rami; "aunque hay mucha competencia, se le ve como uno de los posibles titulares de los bleus". Aunque ahí competiría con su predecesor y rival de esta noche: Benzema. De momento, el objetivo de sus zarpazos está en la Champions, en la que ya le hincó el colmillo al Dinamo de Zagreb en la última jornada con una bonita vaselina. Hoy, La Pantera actúa en el Bernabéu.