Urrutia insiste en 10 millones de déficit

Lo que debería ser una asamblea ordinaria, un ritual sin trascendencias añadidas y con los puntos más o menos claros, adquiere por momentos el aspecto de una discusión irreconciliable y con lecturas para todos los gustos. El presidente del Athletic, Josu Urrutia, se sentó ayer durante más de una hora ante los periodistas para que quedaran diáfanas las razones que defiende en relación a la liquidación del ejercicio anterior y el presupuesto del club para esta temporada.

Una vez más quedó patente que Urrutia ve un déficit de diez millones, inexistente para el anterior directivo rojiblanco, Fernando García Macua, a quien, de hecho, los números le dibujan un superávit. El quid de la cuestión está en los Socios Barria. En opinión de Urrutia, éstos "no son socios de pleno derecho", por lo que los 7,5 millones de euros globales que han adelantado para poder tener un asiento en el futuro campo son "un anticipo" y no un ingreso imputable al pasado ejercicio económico, como defiende la anterior directiva rojiblanca de Fernando García Macua.

El presidente rojiblanco, el contador del club, Alberto Uribe-Echevarría, y el secretario Javier Aldazabal aseguran que "el déficit surge porque se han gastado nueve millones más de lo presupuestado y se ha ingresado un millón menos". Uribe-Echevarría adelantó además que las "seis reuniones" mantenidas con la anterior Junta para aclarar las discrepancias contables evidencian que "no ha habido falta de diálogo; en todo caso falta de acuerdo", precisó. El equipo de Urrutia argumenta que "según el sentido común, los principios jurídicos y las normas del Plan General de contabilidad", los Socios Barria son "acreedores" del club.

"Cuando se cumpla esa condición se contabilizará como ingreso del club", explicó Javier Aldazabal, que recordó que "se intentó modificar los Estatutos del club para crear la figura del Socio Barria para que ingresos fuesen ingresos de socios, pero la Asamblea dijo que no en abril de 2011. Y la Junta Directiva es incompetente para interpretar los Estatutos hasta crear una categoría nueva de socio", aseveró el secretario.

El otro elemento de discrepancias contable entre ambas Juntas es la prima por la firma del nuevo contrato de televisión, que según García Macua reconoce el derecho del club a recibir un pago único de 2 millones. Uribe-Echevarría aseguró que el actual equipo de gobierno "sí lo ha admitido como ingreso, pero no son dos millones, sino 500.000 euros", precisó.

"Es absurdo hacerse trampas al solitario y presentar una imagen que no es. El diagnóstico real es que estamos en un club de fútbol que es deficitario", aseveró Javier Aldazabal, que añadió que la cuestión no es si "creer a esta Junta o a la otra. Hay que creer al auditor del Athletic, que es el mismo desde hace 27 años, y que es el garante de la información de los socios", apostilló.

No obstante, el secretario rojiblanco envió un mensaje tranquilizador. "No nos tiene que asustar el déficit de 10 millones de pérdidas; no significa que tengamos que desesperanzarnos ante el futuro económico del Athletic. En este momento la situación es mala pero las expectativas son muy buenas", vaticinó.