El rescate de Masilela

El futuro de Tsepo Masilela (Mpumalanga, Sudáfrica; 1985) parecía muy lejos de Getafe a finales de junio. Lanzado a probar suerte en una Liga de entidad, el lateral zurdo pidió a su equipo, el Maccabi Haifa, israelí, que lo declarase transferible. El Leicester, de la Segunda División inglesa, se interesó en él para llevárselo cedido, a la vez que negociaba con el Liverpool para fichar a Paul Konchesky, cuyo precio parecía desorbitado para el humilde equipo británico. Los reds, al ver que Masilela lo tenía casi hecho por el Leicester, redujeron sus peticiones por Konchesky en un 70%, así que el Leicester fichó al defensa inglés y descartó, en el último momento, al jugador sudafricano. Masilela se vio entonces en un callejón sin salida: el Maccabi, que ya no contaba con él, había fichado al croata Buljat en su lugar, por lo que tenía completo el cupo de extranjeros. El lateral tuvo entonces que ir a entrenarse con un pequeño equipo de su país, el Moroka Swallows. Entonces, apareció el Getafe, que se enteró de su situación y lo ha traído cedido por el Maccabi. Todo un alivio para Masilela.

Pese a los malos ratos que ha pasado, el futbolista sudafricano no podía mostrarse más feliz el día de su presentación como jugador azulón: había acabado cumpliendo su idea de jugar en una competición de primer nivel. "Siendo la mejor Liga del mundo, mi objetivo es adaptarme lo más rápido posible y formar parte del once inicial cuanto antes", aseguró. Tiene, además, muy claros sus objetivos: "El Getafe es un trampolín para mi carrera, aunque también me gustaría quedarme aquí". Para eso, primero tendrá que pelear por un hueco en el lateral izquierdo con el joven Albertazzi, también cedido, en este caso por el Milan. De momento, dice que ha encajado perfectamente en el grupo: "Tanto la plantilla como el entrenador me han recibido muy bien y tengo claro que debemos mejorar la posición del equipo de la pasada campaña".

Masilela es consciente, no obstante, de que tiene un duro trabajo por delante. "Tengo que acostumbrarme a España y aprender el idioma", reconoce. Luego, deberá pelear para que su nombre comience a sonar en la Liga con la misma fuerza que en su país, donde es uno de los referentes futbolísticos. Ha sido internacional en 33 ocasiones, participado en la Copa Confederaciones de 2009 y en el Mundial de 2010. Debutó con su selección a los 21 años, antes incluso de haber firmado un contrato profesional, cuando se desempeñaba en su primer equipo, el Benoni Premier United, en la Segunda División Sudafricana. Su estreno con los Bafana Bafana le permitió dar un paso más al fichar en 2007 por el Maccabi Haifa, que pagó 400.000 euros por él, y debutar en la Champions. Ahora quiere que el Getafe, su tabla de salvación, sea solo un salto más en su carrera.