El Elche cambia su guion

El Elche va quinto en Segunda División a diez puntos del segundo puesto de ascenso directo. Ya el año pasado albergó esperanzas de ascender, pero entonces su talón de Aquiles era la defensa. "Marcábamos muchos goles, pero también recibíamos muchos", asegura su entrenador José Bordalás. Este año las cosas han dado un giro de 180 grados y han pasado de ser el quinto equipo más goleado de la categoría al tercer equipo que menos tantos ha encajado (28 dianas: 0,85 de media) entre Primera y Segunda, solo superado por Real Madrid (22; 0,71) y Barcelona (16; 0,52). Pero también ha pasado de ser el máximo realizador de la categoría, al sexto que menos tantos consigue, con 34, muy lejos de los 66 del Barcelona B.

Para añadir un elemento más a la ecuación, el Elche fichó en junio a seis de los ocho defensas con los que cuenta en la plantilla. "No siempre se puede mantener el bloque", afirma Francisco Martínez, director deportivo del club; "soy partidario de dar continuidad con algunos retoques, pero al final de la pasada campaña no pudo ser. Algunos jugadores tuvieron otras ofertas y otros acababan contrato". Bordalás opina lo mismo: "Nos vimos obligados a hacerlo. Unos pedían demasiado dinero y somos el 12º presupuesto del campeonato. Otros optaron por nuevas aventuras, pero, a pesar de los cambios, hemos conseguido un equipo muy disciplinado y solvente en defensa". En la retaguardia incorporaron jugadores con experiencia en la categoría como Pelegrín o Albácar, ambos del Rayo, pero también hicieron apuestas arriesgadas como el joven Héctor Verdés o Javier Carpio, que nunca había jugado en Segunda y que es imprescindible en la zaga ilicitana.

Aunque todos coinciden en el ingrediente principal del éxito defensivo. "Trabajamos en defensa desde el delantero hasta el portero", asegura Ripa, junto con Samuel, el único superviviente del año pasado en la zaga. "El equipo trabaja al máximo a nivel defensivo en todas las líneas y bascula. Es un reflejo del entrenador y su trabajo", añade el propio Samuel. "Puedes tener muy buenos defensas, pero si no hay compromiso de todos, no vale para nada", remata Bordalás. Ahora solo falta acertar en el remate. "Este año se fue Jorge Molina y nos falta un hombre realizador; no marcamos pocos goles por ser un equipo especulador, sino que fallamos en la definición", apunta el entrenador. En lo que también están de acuerdo es en no pensar en el ascenso. "La Segunda División es una competición muy pareja y un día estas arriba y dos jornadas después estas a seis puntos", advierte el entrenador. Pero si no encajan goles, a buen seguro que tendrán sus opciones.