El Málaga golea y sale del descenso
El conjunto de Pellegrini aplasta a un Racing sin peligro con un doblete de Rondón
Mateu Lahoz no añadió ni medio segundo en La Rosaleda. No merecía la pena y, además, el Racing, otra de las víctimas ilustres de la huelga salvaje de controladores, tenía prisa para no perder el AVE de vuelta a Santander. En sus espaldas, el equipo de Portugal cargaba con un saco de golazos del Málaga, que, como un motor diesel, empezó muy frío y terminó el encuentro con una velocidad de crucero realmente alta.La primera media hora, francamente desechable, respondió a lo que cabía esperar del equipo local con menos puntos en casa de la liga y el visitante con menos puntos fuera. A falta de creación futbolística, Eliseu destrabó el partido con una jugada de estrategia en el saque de un corner. Y ahí, el Málaga empezó a carburar. Después, el canterano Recio, descubierto por Pellegrini y recién profesionalizado para evitar tentaciones foráneas, templó una vaselina al filo del descanso que Toño no pudo atajar. Un despiste de los centrales del Málaga propició un gol de Rosenberg, un delantero con tanta clase como ineficacia rematadora, a pase del rejuvenecido Munitis, y llevó la inquietud a la grada al filo del descanso.
Málaga, 4; Racing, 1
Málaga CF: Rubén; Gámez, Weligton, Stadsgaards, Mtiliga; Duda (Fernando, m. 74), Sandro Silva (Iván González, m. 61), Recio, Eliseu; Fernández y Rondón (Juanmi, m. 88).
Racing: Toño; Francis (Bolado, m. 61), Henrique, Torrejón, Cisma; Kennedy, Colsa, Diop (Adrián, m. 61), Lacen; Munitis y Rosenberg (Ariel, m. 71).
Goles: 1-0, M. 27: Eliseu. 2-0, M. 43: Recio. 2-1, M. 45: Rosenberg. 3-1, M. 52: Rondón. 4-1, M. 54. Rondón.
Árbitro: Mateu Lahoz (Colegio Valenciano). Mostró tarjeta amarilla al malaguista Sandro Silva (m. 50).
Incidencias: Partido correspondiente a la decimocuarta jornada de Liga de Primera División iputado en el estadio de La Rosaleda ante 23.000 espectadores.
La reacción cántabra fue un espejismo. En el segundo acto, el Málaga ganó en intensidad y profundidad, y Eliseu, muy motivado tras el desquiciado inicio liguero, formó una rentable sociedad con el robusto Rondón. Al final, La Rosaleda, casi ayuna de goles en lo que va de primera vuelta, acabó haciendo la ola fuera del descenso.
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