Bakero, de Polonia a Polonia

Hay episodios que marcan la vida de la gente. Y aunque dice el poeta que al lugar donde has sido feliz nunca debes tratar de volver, el recuerdo nostálgico invita a acercarse al lugar donde se encontró la gloria. El próximo sábado se cumplirán 19 años de un gol legendario escrito en letras de oro en la enciclopedia del Barcelona. Lo logró José Mari Bakero en el Fritz-Walter-Stadium de Kaiserslautern y fue, junto al tanto de Koeman en la final de Wembley de 1992, el icono de la primera Copa de Europa azulgrana.

Por avatares del destino, el protagonista de aquel gol vivirá la simbólica conmemoración a solo 900 kilómetros de Kaiserslautern, en la ciudad polaca de Poznan. Bakero se convirtió ayer en el nuevo entrenador del Lech Poznan en sustitución de Jacek Zielinski tras el pésimo arranque liguero del vigente campeón polaco, antepenúltimo en la clasificación liguera. Será su segunda aventura en Polonia, después de entrenar al Polonia de Varsovia, y su quinto destino en seis años.

Como futbolista, el currículo de José Mari Bakero estuvo marcado por el arraigo y la fidelidad a los colores. Debutó con 17 años con la Real Sociedad y tras ocho vistiendo la camisola donostiarra se marchó a hacer fortuna al Barcelona arropado por cuestiones de paisanaje por la generación de Beguiristain, Goikoetxea y Salinas. Cumplió ocho temporadas como azulgrana ganándose a golpe de sudor y carisma un hueco entre los ilustres de la historia reciente del Barcelona con el Dream Team de Cruyff como referente de una época.

Tuvo una rocambolesca y exótica retirada de apenas seis meses en los Tiburones Rojos de Veracruz en Méjico que anticipó la que sería una carrera errante como entrenador. Arrancó su experiencia en los banquillos como ayudante de Serra Ferrer y posteriormente de Van Gaal en el Barça, y tras unos años de fogueo, emprendió carrera en solitario en el filial del Málaga que militaba en Segunda, sustituyendo a Antonio Tapia a mediados de la temporada 2004 - 2005 y logrando la permanencia del Málaga B.

En 2005 se convirtió en director deportivo de la Real Sociedad y meses más tarde bajó al banquillo blanquiazul para lograr la permanencia en Primera de su equipo de toda la vida. Pero el fútbol no entiende de nostalgias y la temporada siguiente fue destituido.

Su vuelta a los banquillos estuvo marcada por la polémica. En 2007, llegó a Valencia como segundo entrenador de Koeman y ambos protagonizaron un periplo turbulento. Ni siquiera la conquista de la Copa del Rey logró maquillar la pésima temporada en la Liga. Y el curso quedó marcado por el cisma que provocó la exclusión de la plantilla de Angulo, Cañizares y Albelda. El cuerpo técnico fue el brazo ejecutor de una conspiración palaciega urdida para cambiar el reparto de galones en la caseta y la figura de Bakero quedó impregnada para siempre de connotaciones caciquiles. Reminiscencias de su etapa en la selección española cuando, con Clemente como seleccionador, era a todos los efectos capitán in pectore.

Su irregular carrera en los banquillos tomó rumbo al extranjero cuando el pasado verano fue contratado como entrenador del Polonia de Varsovia. Pero, de nuevo, el proyecto quedó inacabado. En esta ocasión casi antes de empezar, puesto que no transcurrió ni siquiera un mes cuando fue destituido por desavenencias con los directivos. Tras cinco partidos con un balance de tres victorias, un empate y tan solo una derrota y con el equipo en la tercera posición de la tabla, le enseñaron la puerta de salida. Pero mientras hacía las maletas, le surgió una segunda oportunidad para dar continuidad a su aventura polaca. A 300 kilometros de Varsovia y 300 kilómetros más cerca de Kaiserslautern. En Poznan, Bakero inaugurará un nuevo capítulo en su peculiar andadura en los banquillos. Su quinto destino en seis años. En ninguno de ellos perduró más de nueve meses.

Bakero, de 47 años, hará su debut como entrenador del Lech Poznan en el choque de mañana jueves ante el Manchester City FC en el Grupo A de la Liga Europa, después de que el Lech cayera por 3-1 en Inglaterra la pasada jornada.