Godín refuerza la defensa del Atlético

Tras varias semanas de negociaciones, Atlético de Madrid y Villarreal han anunciado hoy el traspaso de Diego Godín Leal (1986, Rosario; Uruguay), al conjunto colchonero. El club de la ribera del Manzanares desembolsará una cantidad cercana a los nueve millones de euros por el 50% de los derechos federativos del jugador, negocio poco habitual en España que, sin embargo, el Villarreal lleva efectuando desde hace tiempo en sus operaciones en Suramérica, dónde es práctica habitual compartir entre clubes, representantes e inversores los derechos de los futbolistas.

En el caso de Godín, que rindió a un gran nivel en el Mundial de Sudáfrica con Uruguay, el Villarreal adquirió el 70% del pase del jugador por unos tres millones de euros a su anterior equipo, el Nacional de Montevideo. El 30% restante es propiedad de su agente, que también se llevará parte del montante de la operación.

Tres temporadas ha pertenecido Godín al Villarreal. Su llegada al club castellonense resultó una solución de emergencia, tras lesionarse de gravedad (ligamentos cruzados) Gonzalo Rodríguez en el Trofeo Carranza en agosto del 2007. La espantada de Fabián Ayala al Zaragoza, que tras comprometerse con el Villarreal después de terminar su vínculo con el Valencia, renunció al contrato firmado con la entidad castellonense para marcharse al club maño que le ofreció un sueldo más sustancioso, precisaba rápidamente un recambio. La ruptura unilateral del contrato por parte de Ayala reportó al Villarreal seis millones de euros.

Con la mitad de lo recaudado por un jugador, que ni siquiera pisó de amarillo el Madrigal, el Villarreal fichó a un central contundente, rápido y que ofrece buena salida del balón desde la zona defensiva. "Mi mejor cualidad es la velocidad, voy bien de cabeza y soy intuitivo para anticipar y salir al cruce", se autodefine Godín, admirador de Paolo Montero, ex defensa uruguayo que hizo carrera en la Juventus y que destacaba por su dureza. "Yo no necesito pegar patadas. Intento defender sin darlas", matiza Godín.

Con el central uruguayo y el lateral izquierdo Filipe Luis, el Atlético apuntala la defensa, el lugar de los errores y horrores de los rojiblancos en la pasada temporada. Tras sustituir a Abel en el banquillo del Calderón tras un inicio de Liga irregular, Quique Sánchez Flores se planteó dotar al Atlético de organización y actitud defensiva. Con todo el poder en el ataque, con el Kun Agüero y Diego Forlán, el conjunto colchonero sangraba en la parcela de contención.

La introducción del canterano Domínguez y de De Gea en la portería mejoró los registros defensivos, plasmados, no tanto en Liga, pero sí en las dos competiciones por eliminatorias en las cuales el Atlético alcanzó la final. La doméstica, la Copa del Rey, la perdió ante el Sevilla, ganando el título de la primera Liga Europa (antigua UEFA), al conjunto londinense del Fulham. Con Godín y Filipe Luis, a Quique Sánchez Flores sólo le falta que el portugués Tiago, el director de orquesta del Atlético tras su llegada en la segunda parte del campeonato pasado, acepte reducir parte del salario que percibe en la Juventus de Turín para comprometerse definitivamente con el Atlético, para completar una plantilla de garantías. En defensa y ataque.