El goleador olvidado
Sebastián Abreu, célebre por un gol que no marcó, disputa su segundo Mundial con Uruguay
Uruguay, Argentina, Brasil, México, España, Grecia e Israel. En todas esas Ligas ha jugado Washington Sebastián Abreu (Minas, Uruguay; 1976), más conocido como El Loco Abreu. En estas competiciones ha militado en equipos de la parte alta de la tabla como River Plate y San Lorenzo de Almagro argentinos y el Deportivo de la Coruña de finales de la década de los '90. Con 33 años y medio, es uno de los delanteros de la selección de Uruguay y disputará su segundo Mundial tras su participación en Corea y Japón 2002.
A pesar de sus 297 goles en 520 partidos y de ser el segundo máximo goleador en la historia de la selección uruguaya con 30 dianas en 59 encuentros, su gol más famoso no lo marcó. Fue en un partido contra River en la temporada 1996-1997, cuando tras una jugada trenzada de San Lorenzo, el delantero uruguayo se quedó solo ante la portería y se trastabilló antes de poder rematar. Una locución de televisión de Víctor Hugo Morales, dio la vuelta al mundo y le hizo célebre para la posteridad.
El seleccionador Óscar Tabárez le ha convocado para ir a Sudáfrica, por más que esté en el declive de su carrera. En los últimos dos años, ha jugado en tres equipos de segunda fila: la Real Sociedad, en Segunda División, en el Aris de Salónica griego, y actualmente, en el Botafogo brasileño, importante en Río de Janeiro pero un equipo medio a nivel internacional. Aporta: trabajo y veteranía. Pero su papel se intuye secundario, toda vez que Forlán y Luis Suárez copan la demarcación de delantero centro.
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