El Tau se proclama campeón de la Supercopa ACB

El Tau Cerámica ganó su tercera Supercopa ACB al derrotar, por 73-85, al anfitrión iurbentia Bilbao Basket en la cuarta edición del torneo, disputada en el Bizkaia Arena del BEC de Bilbao, y en la que el pívot brasileño Tiago Splitter, hoy 16 puntos y 7 rebotes, volvió a repetir, como el año pasado en Málaga, como ''Jugador Más Valioso'' (MVP) del campeonato inaugural del curso.

La Supercopa ACB es un asunto del Tau, que la ha ganado todas las veces que se ha disputado este joven torneo, excepto la primera, que se la adjudicó el Barcelona en 2004-05 frente al Real Madrid en Málaga. El Tau fue una montaña muy grande para el iurbentia, que sucumbió, además, ante la maldición del anfitrión, que nunca la ha ganado.

El derbi vasco adelantó emociones y pasiones de la temporada 2007-08 que arranca el próximo fin de semana. David contra Goliat (el símil que empleó el seleccionador ruso, David Blatt, antes de ganar a España en el Eurobasket), el anfitrión contra el vigente campeón, la embarcación de paseo frente al transantlántico millonario de Querejeta. El iurbentia Bilbao gastó mucha gasolina en alcanzar ante el Bara la final de su Supercopa. No le quedó más para consolidar la gesta en su debú en el torneo. La presión defensiva no fue la misma que ante Lakovic, Marcelinho Huertas no fue tampoco el mismo, Igor Rakocevic, que acababa de levantar el trofeo de mejor triplista, y el lituano Jasaitis eran un martillo desde los 6,25 y a Tiago Splitter no había quién le frenara.

El pívot brasileño hoy no tuvo a su espalda a Will McDonald, centro de la polémica por los ''asimilados'' que ha abierto una brecha entre ACB y FEB y sindicato de jugadores, no inscrito "de forma preventiva" por el Tau hasta que se aclare si su matrimonio fue o no de conveniencia para adquirir la nacionalidad española. No le hizo falta hoy al Tau, muy mejorado respecto al rostro que exhibió ante el Real Madrid y en el que Spahija parece haber encajado las piezas: Prigioni, líder y anotador; Jasaitis y Rakocevic mantienen la tradición exterior baskonista; Splitter vuelve a ser el de antes, el que fue junto a Luis Scola; Planinic empieza a justificar los adjetivos que se gastaron cuando fue fichado, y Singleton, no es Scola, no eso no.

Las ventajas siempre fueron para el Tau, un rodillo desde el inicio: 9-19, 25-36, 34-49, 46-64, la máxima con 18 puntos arriba. El iurbentia, al que se le lesionó Recker, era un acordeón, que lo mismo soplaba al cogote del Baskonia (25-28; 60-68) con algún triple de Javi Salgado, que veía cómo el equipo vitoriano le devolvía a la realidad (62-77, min. 37) para sentenciar la final vasca. No obstante, Txus Vidorreta se fue con la conciencia tranquila porque la Supercopa le dijo que, con estos alumnos, podrán luchar por recibir alguna clase en la Copa del Rey.

El Tau no se cansa de ganar pese a cambiar la maquinaria. Acumula tres Supercopas consecutivas ante equipos locales y es el único equipo que, junto al AXA Barcelona, ha ganado los tres trofeos ACB en juego (Liga, una; Copa del Rey, cinco; y Supercopa, tres). Spahija estrena currículo en España después de hacerlo en Croacia, Eslovenia, Lituania e Israel. Todo un hito, al igual que Sergi Vidal, olvidado para su técnico en el banco, pero que ya puede presumir de una Liga, tres Copas y otras tantas Supercopas.