España se la juega sin Bojan

España buscará mañana ante Nigeria su primer título Mundial sub 17 en una final deslucida y condicionada por la baja del delantero Bojan Krkic, que deja huérfano el ataque del equipo español, aspirante en dos ocasiones a convertirse en campeón del mundo. Dos veces finalista para optar a un título que se le resiste, Juan Santisteban se encontrará en Seúl con una nueva oportunidad cuatro años después de la última ocasión en Finlandia 2003, donde un tempranero gol del brasileño Leonardo, a los 7 minutos, privó a los españoles de colgarse la medalla de oro.

Entonces la llamada 'Quinta de Cesc', en la que entraron jugadores como Silva, Jurado, Xisco, Pallardó o Sisi, se quedó sólo a un paso. Ahora la oportunidad de repetirlo se brindaba clara para Bojan Krkic y sus compañeros si no hubiera sido por una rigurosa decisión arbitral que dejó al mejor jugador fuera de la gran final. Después de marcar el gol que clasificaba a España en la prórroga con Ghana era imposible imaginar que Bojan no estaría en ella y menos por una expulsión, la primera de su carrera, en el último minuto. Pero el árbitro brasileño Salvio Fagundes decidió que fuese así y la baja de Bojan, sedante para la selección nigeriana, obligará a recomponer el once a Juan Santisteban.

El delantero del Barca, que cumplió 17 años durante el campeonato el pasado 28 de agosto, ha sido pieza fundamental y máximo goleador del equipo. Un gol suyo el pasado 13 de mayo ante Inglaterra dio a los españoles el título europeo sub 17. Digerido el disgusto, España, que también tiene la baja de Jordi Pablo por lesión, cederá la responsabilidad goleadora a Daniel Aquino, arropado unos metros más atrás probablemente por Lukas, Iago e Isma junto a Camacho y Fran Mérida en el doble pivote. Aquino, delantero del Real Murcia e hijo del veterano 'Toro Aquino', ha respondido siempre a las oportunidades que le ha dado el seleccionador. En la semifinal frente a Ghana marcó el primer gol del equipo y en los cuartos de final contra Francia anotó el penalti decisivo que dio a España la continuidad en el torneo.

Nigeria, un hueso

Con cinco victorias y un empate y después de dos prórrogas para saldar los cuartos -con Francia- y las semifinales -con Ghana-, los españoles tendrán mañana noventa minutos por delante para doblegar a un equipo que ha ganado los seis partidos que ha jugado. Nigeria, dos veces campeona del Mundo sub 17, en China 1985 y en Japón 1993, es el último obstáculo. Los africanos, con un físico superior a la edad que deben tener y muy similar al de la selección de Ghana, cuentan además con el máximo goleador de la competición, el delantero Macauley Chrisantus, autor de 7 goles.

Chrisantus forma sociedad en el campo con Rabiu Ibrahim, a quien en su país describen como el nuevo Jay-Jay Okocha y como el próximo valor a exportar al fútbol europeo. Cualquier acción de ellos puede determinar el desenlace de un encuentro que presentará también los contrastes entre el fútbol europeo y el africano y el estilo de un experto como Santisteban, después de 20 años en el banquillo, y un "novato" como Yemi Tella, cuestionado en su país por falta de experiencia y amante del fútbol teórico.