La hora de la Selección

Los jugadores de la selección española se han concentrado hoy en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas dispuestos a aparcar la Liga, a olvidarse del desenlace más apasionante de los últimos años, para concentrarse en dos partidos de clasificación para la Eurocopa, Letonia y Liechtenstein, más importantes que atractivos.

Justo en el momento culminante de la Liga, en su recta final, la selección introduce un peligroso paréntesis. España está obligada a ganar, pero la escasa entidad de los rivales no ayuda a que los jugadores se centren en esa misión. El propio técnico, Luis Aragonés, ha asegurado que es más importante la labor de mentalización que el propio aspecto físico, "que la gente se olvide de la Liga".

Así lo han reconocido también los jugadores a su llegada a la Ciudad del Fútbol. "Es complicado cambiar el ''chip'', pero tenemos que hacerlo rápidamente, porque son dos partidos en los que cualquier punto que nos dejemos será un gran error", ha destacado el centrocampista delValencia David Albelda. El defensa del Real Madrid ha opinado que "no es para nada inoportuna. Para mí, todas las convocatorias son una buena experiencia, un sueño que hay que aprovechar. Es cierto que estos dos partidos llegan en un momento complicado, por la igualdad que hay en la Liga, pero somos profesionales y sabemos diferenciar cuándo estamos con nuestro club y cuándo con la selección"

Para Fernando Torres, esta convocatoria tiene también el aliciente más, volver a la titularidad, ante la ausencia por lesión de Fernando Morientes, pero el delantero del Atlético prefiere mostrarse cauto. "Que pueda ser titular es una cuestión del seleccionador", ha dicho. El capitán atlético ha hablado de los dos próximos rivales de los españoles y ha admitido que ni Letonia, ni Liechtenstein son rivales atractivos, pero recalca que España está obligada a obtener los dos triunfos como visitante, "claves para ir a la Eurocopa".

La selección española completará su primer entrenamiento esta tarde y el próximo viernes viajará a Riga, para enfrentarse a Letonia, un día después.