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Reportaje:LA CARRERA OLÍMPICA

Historias de favoritos derrotados

Dice la leyenda que el que entra como Papa a la elección de Sumo Pontífice en la Capilla Sixtina sale como cardenal. Y dice la historia que quien llega como favorito a la correspondiente sesión del Comité Olímpico Internacional en la que se elige ciudad organizadora sale de allí escaldado y haciendo cuentas de lo gastado. París, en esto, es además toda una experta.

La ciudad de la Luz encontró su primer revés en Lausanne, en 1987. Entró como favorita en el Palais de Beaulieu junto a otras cinco ciudades: Barcelona, Brisbane, Belgrado, Birmingham y Ámsterdam. El varapalo fue de los que hacen época, ya que la Barcelona de Juan Antonio Samaranch ni siquiera tuvo que llegar a la última votación. En la tercera ronda, la candidata española se impuso por mayoría absoluta (47 votos) a sus rivales francesa (23), australiana (10) y yugoslava (5). El Papa olímpico salía por primera vez como cardenal.

Tres años después, en la nonagésima sexta sesión del COI, todo parecía preparado para que Atenas fuese la ciudad elegida para organizar los Juegos de 1996, los del Centenario. Nada que ver. La favorita griega sufrió un revolcón de consideraciones apocalípticas en Tokio. Descartadas Belgrado, Manchester y Melbourne, los delegados de Atenas se preparaban para dar el gran salto en la última votación. Pero en la misma se impuso Atlanta, la sede central de la Coca Cola, uno de los grandes partners del COI, por 51 votos a 35. Una vez más, la favorita salía escaldada y, por primera vez, una ciudad novata conseguía la organización de unos Juegos Olímpicos.

La historia se repitió de nuevo en 1993, en Mónaco. Reunida la 101ª sesión del Comité Olímpico Internacional, todas las quinielas apuntaban a la expansión del ya consolidado movimiento olímpico. La universalidad daba todas las papeletas a Pekín, en reconocimiento al ingente aperturismo y crecimiento de la China comunista. No hubo caso. De nuevo la favorita se despedía con las excusas justas. Sydney se impuso a la candidata oriental en la última votación por 45 votos a 43.

1997. Lausanne, de nuevo. 106ª sesión del COI y una cuenta histórica pendiente. Atenas se vuelve a presentar para organizar unos Juegos después del desplante de los del Centenario, pero su caótica organización da todos los números y favoritismos a Roma e incluso a Ciudad del Cabo, en los que serían los primeros Juegos africanos. La candidata sudafricana cae en la penúltima votación y deja a la capital italiana vía libre para celebrar los primeros Juegos del tercer milenio. Pero el viento electoral gira y Atenas se impone en la última ronda por 66 votos a 41.

De nuevo favorita

Sin solución de continuidad y como si de una maldición se tratase, París se presenta en la 112ª sesión del COI en Moscú en 2001 con la grandeur como bandera y la arrogancia de saberse ganadora como discurso. El bofetón alcanza cotas nunca vistas. En la segunda votación, Pekín arrasa a sus rivales y se convierte en la ciudad organizadora de los Juegos de 2008. La favorita París apenas consigue 18 votos y queda incluso por detrás de Toronto.

Ahora, la capital francesa regresa al lugar del crimen, a una votación en Singapur en la que vuelve a partir como favorita. La cuestión es si habrá aprendido a entrar en el Raffles Convention Center como cardenal para salir Papa o vuelve a presentarse como favorita para salir derrotada. En este caso, y después de tres infartos, será necesaria la actuación del camarlengo con su martillo de plata.

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