El Zaragoza se clasifica (1-1)

El Real Zaragoza ha logrado su objetivo de clasificarse para los dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA al empatar en Brujas en un partido en el que fue superior a su rival pero no supo concretar su dominio.

Los belgas, con un fútbol tosco, pusieron en más apuros de los esperados a un Real Zaragoza que no supo concretar sus claras ocasiones y casi terminó pidiendo la hora para lograr su clasificación como segundo de grupo. Los zaragozanos sólo necesitaban el empate en tierras flamencas para clasificarse y fue lo que lograron, aunque no fueron capaces de ganar y pasar a la siguiente ronda como campeones del grupo C en el que partían como favoritos.

Los primeros minutos fueron de tanteo con un conjunto belga que cedía el control del balón a su rival a la espera de sorprender con algún contragolpe, aunque los defensores maños les hacían caer una y otra vez en fuera de juego. La primera ocasión clara para los zaragocistas llegó a los nueve minutos en un rápido contragolpe entre José María Movilla y David Villa que lanzó un duro disparo desde fuera del área que obligó a Butina a emplearse a fondo para evitar el gol y dos minutos después de nuevo Villa cruzó en exceso su remate.

A los hombres de Trond Sollied les costaba mucho con llegar con peligro hasta la portería defendida por Luis García que apenas tenía trabajo y hasta poco antes de la media hora de juego no tuvo que intervenir en un centro blando y sin peligro de Verheyen. En el equipo aragonés su hombre más incisivo era David Villa que se movía bien entre líneas y a los veintiséis minutos tuvo una nueva ocasión pero se quedó sin ángulo.

Los minutos transcurrían sin que ninguno de los dos equipos llegase con claridad hasta que Cani en una jugada individual estuvo a punto de sorprender a Butina, y poco después Savio, completamente solo, dispuso del tiempo necesario para pensar cómo rematar de cabeza el excelente centro de Cani y de vaselina superó al cancerbero croata.

Los flamencos eran conscientes de que sólo les valía el triunfo y salieron del vestuario dispuestos a recortar distancias lo antes posible en el marcador, pero los zaragocistas no se dejaron intimidar y supieron frenar la impetuosa salida de su adversario. El conjunto que dirige Víctor Muñoz buscaba sentenciar el partido a la contra y Oscar González a punto estuvo de hacerlo a los 56 minutos y poco después fue Cani el que intentó sorprender a Butina con una vaselina.

El primer hueco en la defensa maña lo encontraron a los 67 minutos por la banda izquierda por medio del esloveno Nastja Ceh que no desperdició para lograr la igualada. El Zaragoza vivía momentos de desconcierto sobre el terreno de juego y los belgas estuvieron a punto de darle la vuelta al marcador en una contra de Roelandts que obligó a Luis García a salir de su área para arrebatarle el balón antes de que pudiese rematar.

La expulsión del local Spilar a falta de catorce minutos allanó un poco más el camino de los aragoneses hacia los dieciseisavos de final, aunque Lange desperdició un claro contragolpe cuando se plantaba solo ante el portero zaragocista. En la recta final del partido el equipo zaragocista no sabía como zafarse de la presión de los belgas que a pesar de sus escasos recursos intentaban por todos los medios marcar su segundo gol que no llegó.