Zidane y Henry meten a Francia en cuartos

Francia cumplió el trámite ante Suiza, con más problemas de los esperados, y se mete en cuartos de final como primera clasificada del grupo B. Su próximo rival será Grecia, un maldito combinado para Sáez y los suyos, que en su día llevó a España a la repesca y en la presente Eurocopa comenzó a hacernos las maletas. Se allana el camino a semifinales para Zidane, Henry y compañía.

La selección gala, con la excepción de Pires y un errático pero voluntarioso Henry, volvió a quedarse en Zidane y poco más. Pero el gran capitán volvió a ser suficiente. Esta vez sin gran brillantez y aprovechando un saque de esquina con cantada incluida de Stiel. Un gol de cabeza, casi de espaldas, con la calva coronilla, como el que hiciera a Francia campeona del Mundo frente a Brasil en el 98. Pese a sus 31 años, pese a ser centrocampista y jugar con dos de los mejores arietes del continente -Henry y Trezeguet- y pese a su nefasta temporada en el Madrid, Zizou es con cuatro goles el pichichi de la competición.

Suiza mejoró respecto a las anteriores jornadas, más equilibrada con Wicky -el Beckham suizo- y Vogel en el centro del campo, y acabó dominando a los 'bleus' tras el empate de Vonlanthen. El jugador del PSV finalizó con sutileza -de tiro cruzado a contrapié- una bonita asistencia de Cabañas. Sin embargo, para desesperación de Santini, el mayor mérito en el gol suizo fue de Silvestre, ¡vaya día!, que entregó al contrario un cómodo pase a Vieira.

Continuó adormecida la vigente campeona durante la mayor parte del segundo periodo, incapaz de encontrar caminos hacia la meta de Stiel entre la poblada defensa rojiblanca, que apostada atrás, le obligó a realizar ataques estáticos, sin posibilidad alguna de sorpresa. Para colmo del aburrimiento, Francia insistió hasta la saciedad y la desesperación en atacar por el centro debido a su alarmante falta de interiores y la escasa aportación ofensiva de Gallas y Lizarazu. ¡Qué diferencia con el Portugal de Figo y Cristiano Ronaldo!

Henry tuvo recompensa

Köbi Kuhn condenó a Suiza a morir de mediocridad, buscando un milagro a la contra que nunca llegó. La maldición de los cobardes. El tostón lo rompió Henry, que encontró en los minutos finales el premio a su insistencia con dos goles. A buen seguro que jugará más alegre y confiado en el cruce de cuartos frente a Grecia, tras colocar a Francia en la siguiente fase como primera de grupo. El delantero del Arsenal acertó a bajar un balón con la diestra y a empujarlo a la red con la zurda en el primero de sus tantos, y a finalizar sobrado una jugada individual en el que finiquitó el desigual duelo.