‘The Beathoven’, o cuando Beethoven se convirtió en el quinto ‘beatle’
La tercera edición del concierto benéfico ‘Dreamers’ reúne a 500 músicos bajo la batuta de Ramón Torrelledó para fusionar las canciones clásicas del cuarteto de Liverpool con el compositor de Bonn
Aunque uno nació en 1770, en Bonn (Alemania), y los otros revolucionaron la música popular en la década de los sesenta, Beethoven y los Beatles están más cerca de lo que parece. Lo sabe bien el director de orquesta cántabro Ramón Torrelledó. En la tercera edición de Dreamers, evento organizado por la Fundación GMP, institución sin ánimo de lucro, el maestro dirige a un grupo de casi 500 músicos para interpretar The Beathoven, un concierto con un repertorio que combina canciones de los ...
Aunque uno nació en 1770, en Bonn (Alemania), y los otros revolucionaron la música popular en la década de los sesenta, Beethoven y los Beatles están más cerca de lo que parece. Lo sabe bien el director de orquesta cántabro Ramón Torrelledó. En la tercera edición de Dreamers, evento organizado por la Fundación GMP, institución sin ánimo de lucro, el maestro dirige a un grupo de casi 500 músicos para interpretar The Beathoven, un concierto con un repertorio que combina canciones de los fab four con composiciones clásicas de Beethoven. Del medio millar de intérpretes, más de 70 son músicos seleccionados a través de una audición en línea y el resto pertenecen a 15 coros de la Comunidad de Madrid. Todo con un fin benéfico que culminará este martes, 26 de abril, en el Auditorio Nacional de Música.
Esta cita, programada en principio para 2020, se tuvo que aplazar a causa de la pandemia. Ya entonces Torrelledó le daba vueltas a la cabeza para idear qué podía preparar para este Dreamers —un proyecto que consiste en formar una orquesta efímera, para dar un solo concierto benéfico—. Por efemérides, tanto el cuarteto de Liverpool como el Beethoven estaban de aniversario: The Beatles cumplían 50 años de su separación, mientras que también se celebraba el 250º aniversario del nacimiento de Beethoven.
Cuando empezó el trabajo para fusionar ambos estilos, el director encontró muchas similitudes, tanto en la narrativa como en la armonía. Primero se fijó en la importancia que tenía el número nueve [en la canción Revolution se repite de fondo como una letanía “number nine”] que llamó su atención. “En la música clásica es muy significativo. Después de componer la Novena, Beethoven murió, Schubert hizo otra y ya no hizo la décima porque se murió. Y Dvořák hizo la Novena y se murió. Y Bruckner hizo la Novena y se murió”, cuenta Torrelledó. “Para evitar este maleficio, Mahler hizo la Novena, y a la Décima no la llamó así, sino La canción de la Tierra. Y pensó que se había liberado de la maldición, así que empezó su Décima, y en el primer movimiento se murió. En la música popular, ese número emblemático sería el 27, edad con la que murieron Jimy Hendrix, Janis Joplin, Kurt Cobain… Y dos más siete son nueve. Lo que unía ambos mundos era este número y por eso hice nueve obras que unen el repertorio de Beethoven con los melenudos, que son las que forman The Beathoven”.
El director destaca que le pareció “maravilloso” como “fluían armónicamente” muchos de los compases, aunque el eje vertebral se ha sustentado sobre todo en el apartado rítmico. Así ha conseguido entrelazar el segundo movimiento de la Novena con All You Need Is Love y Yellow Submarine; o el cuarto, popularmente conocido como El himno de la alegría, con Something, incluida en el mítico Abbey Road (1969).
La idea de estas combinaciones, además de atraer a Torrelledó, le pareció un ejercicio perfecto para fusionar ambos mundos musicales, el del pop y el de la clásica, que a veces parecen tan distantes. “Cómo no te va a gustar tomarte unas aceitunitas, un pincho de tortilla con tus amigos en la barra del bar. Y después, cómo no va a gustarte una menestra cocinada en dos horas, en un buen restaurante con su mantel”, compara sobre una relación que, lamenta, “se podría haber llevado mejor por ambas partes”.
Más allá del reto que han supuesto las partituras, Torrelledó se ha enfrentado a otro no menos importante: dirigir y coordinar a 500 músicos que solo han tenido cinco ensayos para entenderse. “Lo más valioso es que tú les des el alma, mostrarles la música muy claramente y crear un ambiente muy positivo. Abrirles la puerta a que den lo mejor que tengan, y luego ya lo equilibraremos”, expresa. Además de la selección en línea, la orquesta cuenta con una variedad de coros que cubren todos los rangos y edades: Rock And Choir, de Torrelodones (Madrid), el coro de cámara del Hospital 12 de Octubre o el coro de niños de Escuela de Barrio, así hasta 15.
El director de la Fundación Gmp, Francisco Fernández, explica los motivos por los que eligieron el nombre de Dreamers (Soñadores). “Por un lado, es la oportunidad de tocar en una gran orquesta, en un gran auditorio y con un gran director, como es el maestro Torrelledó. Mientras que por otro, el objetivo último es recaudar fondos para proyectos sociales que mejoran la vida de personas con discapacidad, personas que necesitan apoyo a veces para poder hacer las cosas, pero personas que pueden hacer prácticamente todo lo que se puedan plantear si cuentan con esos apoyos”, suscribe Fernández. Cuenta con que dentro de poco puedan salir a otras comunidades de España para llevar hasta ellos esta propuesta de concierto. Y difundir al público que, aunque siga en pie el debate de quién fue el quinto beatle, quede claro que Beethoven lo podría haber sido perfectamente.
'The Beathoven'
Cuándo: Martes 26 de abril, a las 19.30.
Dónde: Auditorio Nacional de Música (calle del Príncipe de Vergara, 146).
Precio: 32 y 27 euros. Concierto benéfico. La recaudación será destinada a las organizaciones Down Madrid y a la Asociación APSA Alicante.