‘Grupo 2: Homicidios’, crímenes reales para rodar una ficción

El Grupo 2 de Homicidios fue un grupo de policías nacionales que, desde 1982 y durante 20 años, resolvieron más de 200 casos. Con sede en Zaragoza, pero con un radio de acción que sobrepasaba la comunidad de Aragón, estaba especializado en resolver crímenes y delitos violentos. El 90% de los casos los resolvieron con éxito. Ahora, esos crímenes y las personas que trabajaron en ellos son los protagonistas de la ficción documental Grupo 2: Homicidios, que esta noche (22.45) estrena Cuatro.

 "No queríamos hacer una docuserie al uso ni una ficción basada en hechos reales", cuenta Roberto Roldán, director y creador de Grupo 2: Homicidios. Por eso, optaron por escribir una serie de ficción, con guiones y actores al uso, pero en la que los personajes reales, en determinados puntos del relato, cuentan los hechos en primera persona. "Es un thriller policíaco hecho desde la realidad", explica Roldán.

El germen del programa se halla en un capítulo creado por Factoría Plural y que, en su emisión el año pasado la televisión autonómica aragonesa, logró un 22,6% de cuota de pantalla. Tras cosechar ese éxito, ha dado el salto a Cuatro en forma de serie de siete capítulos que siguen el trabajo en varias investigaciones de esta unidad policial. "Nos gustó la época de los ochenta visualmente, y era el momento en que este grupo de policías estaba en pleno auge", explica Roldán sobre la razón de elegir ese contexto histórico para esta serie que sigue la veta de la tendencia en auge del true crime, que en España cuenta con representantes recientes como Muerte en León o Lo que la verdad esconde: El caso Asunta.

La propuesta de Grupo 2: Homicidios quiere dar una vuelta de tuerca al género. Partiendo de una investigación y documentación profunda a partir de archivos, sumarios de casos y recuerdos y testimonios de los implicados, se escribe el guion de la serie de ficción posterior. "Lo más complejo ha sido medir la cantidad de partes reales que se intercalan para que no te saque de la historia como espectador", recuerda el director. "No es una reconstrucción, es todo guion. Pero incluye información que aporta el personaje que estuvo allí. Es algo diferente a lo que se ha hecho antes", remata Roldán.