Un ejercicio para la memoria
Tres obras de Resnais que cumplen su objetivo en el CAAC: proponer un documental nacido de un suelo fértil en valores culturales
Guernica (1950, en colaboración con Hessens), Les statues meurent aussi (1953, con Chris Marker y Ghislain Cloquet) y Toute la mémoire du monde (1956), tres obras de Resnais que cumplen su objetivo: proponer un documental nacido de un suelo fértil en valores culturales y agitado por elementos políticos, sin renunciar a una consistente poética.
Guernica es un recordatorio del salvajismo nazi (aceptado por Franco) y la reivindicación de un autor, Picasso, cuya identidad en Francia era entonces más política que artística: su actitud durante la ocupación se conocía y valoraba más que su obra. El filme es un canto a la libertad. Les statues meurent aussi es un alegato contra el colonialismo que ignoró los modos de vida de África, los convirtió en folclore y explotó sus recursos, incluido el arte, degradándolo a souvenir. El temple utópico del final del filme conecta bien con la tercera cinta dedicada a la Biblioteca Nacional de Francia, donde la memoria cobra vida en la inteligencia y sensibilidad de cada lector que, al leer, hace su propio libro.
Las tres obras se contextualizan. La última, con fotos de Candida Höfer y la videoinstalación de Nina Fischer & Maroan el Sani, que recogen las salas vacías de la antigua bibliotecal. Esculturas africanas (colección Sánchez-Ubiría) prologan Las estatuas también mueren, que se contrasta con It for others, vídeo de Duncan Campbell que, recogiendo fragmentos y conceptos del filme de Resnais-Marker-Cloquet, los lleva a un plano más general (la teoría del valor de Marx) y más actual, la reducción de la imagen a mito publicitario. Finalmente, Guernica aparece entre las fotos de Dora Maar del proceso de elaboración del cuadro de Picasso y trabajos de Daniel García Andújar que muestran cómo aquel bombardeo de una población civil se consolidó como táctica militar al uso. La muestra, pues, rememora los valores modernos, confrontándolos con nuestra época. No cultiva la añoranza. Tampoco el fatalismo. Sólo libera terrenos para la pregunta sin apuntar posibles respuestas.
Remake Resnais. Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. Sevilla. Hasta el 28 de febrero.
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